EUGENIO RODRIGUEZ El Consell Insular ya ha instalado en su azotea 60 placas fotovoltaicas, conectadas a la red eléctrica del edificio, dentro del plan de solarización de todos los centros de la institución en la isla. El 15 por ciento de la electricidad que consuma el Consell Insular procederá directamente de este fuente de energía renovable y sostenible. El Consell también venderá parte de la energía eléctrica producida por este sistema a la central de Gesa, para lo que prevé unos ingresos de 4.600 euros (765.000 pesetas) al año.

La oficina de energía del Consell Insular, dirigida por la ingeniera técnica Eva Escandell, calcula que el sistema fotovoltaico generará anualmente de manera limpia 11.500 kilovatios, lo que evitará la emisión de 9.037 kilogramos de CO2 en la atmósfera. El coste de toda la instalación asciende a 90.000 euros (15 millones de pesetas). Las placas forman dos filas, con una separación de dos metros, y una rama que sobresale sobre la terraza de la cuarta planta del edificio para que la instalación sea visible. El sistema foltovoltaico está conectado a un ordenador central, situado en la tercera planta del edificio.

La consellera de medi Ambient, Fanny Tur, anunció que a partir de la próxima semana comenzarán las obras para instalar el mismo sistema en el edificio polivalente y la escoleta de Cas Serres, que tendrá un coste de 66.000 euros (11 millones de pesetas). Lo mismo se hará en la escoleta de Santa Eulària (33.000 euros) y en el futuro edificio polivalente de Formentera, que, en este caso, tendrá un coste de 45.000 euros.