El número de afiliados a la Asociación de donantes de sangre de Eivissa y Formentera ha aumentado un 49% respecto al mismo periodo del año pasado. «Esto es debido a la publicidad que se ha hecho; hemos colgado un montón de carteles, y debido a la concienciación social», afirmó el presidente de la asociación, Antonio Sepúlveda. Ahora mismo, la sociedad cuenta con cerca de 2.800 afiliados.

Para poder donar sangre se debe tener entre 18 y 65 años y un peso mínimo de 50 kilos: «Solo pedimos una buena salud, no buscamos supermanes porque no existen», bromeó. La asociación se creó en 1967 y en el transcurso de estos años sus socios han aportado más de 18.000 litros de sangre: «Es imposible saber la cantidad de vidas que se han salvado», dijo el presidente de la asociación, «pero se han salvado muchas», añadió. De cada una de las bolsitas se hacen tres fracciones. Una de concentrado de hematíes, otra de plaquetas, que sirven para regular la coagulación de la sangre, y una última de plasma, con la que se hacen muchas medicinas.

Los asociados no obtienen ninguna ventaja, sólo la satisfacción particular de haber hecho una acción solidaria», recalcó Antonio Sepúlveda. «Lo hago por nada, solo porque me parece una buena acción», dijo Guadalupe Benavides, que es donante desde hace cuatro años. Las necesidades hematológicas de Eivissa y Formentera están totalmente cubiertas gracias a la constancia de sus componentes.