Un total de 585 pacientes han sufrido intervenciones quirúrgicas en Can Misses sin necesidad de ser ingresados en el hospital durante el primer semestre de este año. El hecho de que la recuperación de los pacientes haya sido en su casa y no en una cama del hospital se debe a que se ha acogido, de manera voluntaria, a la Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) de Can Misses. La CMA funciona como una unidad dependiente del hospital e integrada con lo que participa de los recursos materiales y humanos de Can Misses.

El año pasado se efectuaron 1.210 intervenciones de CMA. En comparación con la cirugía programada del hospital, supone el 54'7 por ciento de todas las operaciones programadas que se hicieron en el hospital el año pasado. Desde que en 1997 se inició este programa, se ha pasado de un 30 por ciento a más de la mitad.

Los 585 pacientes operados en el primer semestre de este año son menos que los registrados el año pasado cuando se alcanzaron los 700 en las mismas fechas. El motivo de esta bajada se debe al problema de la falta de anestesistas en los primeros meses del año, «a pesar de ello se mantiene un índice de sustitución mayor del 50%», precisó el coordinador del servicio de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) de Can Misses, el cirujano Fernando Martín.

Dentro de la CMA se hacen intervenciones de distintos servicios: Cirugía con operaciones de hernias inguinales, umbilicales y varices; Oftalmología, la mayoría de las cataratas que se operan es por CMA; Trauma, artroscopias; en urología, fimosis y vasectomia; Otorrino, amigdaladas y drenaje timpánico, y en el servicio de Ginecología, legrados, ligadura de trompas y biopsias. Los servicios más demandados son cirugía, oftalmología y traumatología .

Más que reducir la lista de espera en el hospital Can Misses, con la Cirugía Mayor Ambulatoria se consigue descender la estancia hospitalaria con lo que contribuye a bajar el gato sanitario. De este modo, estos recursos del hospital se pueden orientar a otros sectores dentro del hospital. El objetivo de este programa es que la población de las Pitiüses «tenga la seguridad absoluta de que haciendo este tipo de cirugía va a estar atendida de la misma manera o incluso mejor que haciendo una cirugía tradicional, con ingreso», indicó el cirujano Fernando Martín.