Rugidos y no precisamente de felinos fue lo que ayer por la tarde se pudo oír principalmente en las carreteras ibicencas. Unas 200 Harley Davidson llegadas en su mayoría desde Alemania están disfrutando estos días de la XI Ibiza Bike Week, concentración organizada por el Gremio alemán de harleys.

Para esta undécima edición se han preparado variadas actividades entre las que ayer destacó una vuelta a la isla. Los moteros se concentraron en Platja den Bossa para desde este punto comenzar una expedición por las principales carreteras ibicencas.

El preludio al desfile fue un ambiente dominado por el botas, chalecos, pantalones apretados, largas melenas, cascos e impresionantes tatuajes. Espectaculares motos cuidadas con esmero y relucientes ante los tímidos rayos de sol de ayer por la tarde se exhibían entre los amantes de estos vehículos que cabalgaban debidamente equipados en cuero.

La concentración de Eivissa es una de las más importantes dentro del gremio de las harleys. Según explicaron algunos de los participantes «aquí todo es favorable: la climatología, la gente, las carreteras, el ambiente. Es por eso que los moteros alemanes no dudan en desplazarse a lomo de sus carros de acero hasta la isla». «En Alemania hay mucha devoción por las harleys, pero el tiempo no suele acompañarnos en las exhibiciones», concluyen.