Los vecinos de la urbanización de Can Poll, en la carretera vieja de Santa Eulària, están indignados porque llevan casi una semana sin agua. «No tenemos agua desde el lunes. Es mentira que ya se haya restablecido el servicio de agua. Nosotros seguimos igual. No tengo ropa que ponerme y ni siquiera he podido fregar los platos de la cena de Nochebuena», explicó ayer una vecina afectada a este periódico.

Para Aqualia, sin embargo, según ha podido saber este periódico, sólo quedaba un cliente sin agua debido a que por problemas técnicos el agua del depósito no podía llegar hasta su casa.

Una avería de la bomba del pozo que abastece a parte de Cala Llonga y la urbanización Siesta se averió el día 23 y tuvo sin agua durante tres días a la mayor parte de los afectados. Para restablecer el servicio, Aqualia tuvo que echar mano de camiones cuba para transportar agua de