El Govern pretende una solución que ligue la obligación de servicio público con la contención de los precios.

M.JUNCOSA

El equipo de trabajo, formado por parte balear por los consellers d'Hisenda y Transports, Joan Mesquida y Francesc Quetglas, junto con un representante de cada uno de los Consells Insulars, se reunirá la semana que viene en Madrid con el director general de Aviación Civil, Ignacio Estaun, y el subsecretario de Fomento, Adolfo Menénez, quien se comprometió en poner encima de la mesa una propuesta concreta para la declaración de servicio público en algunas de las rutas aéreas que propone el Govern.

Tras la reunión que mantuvo con Quetglas y Mesquida, Menéndez eludió fijar un plazo para la aprobación de la declaración de obligación de servicio público del transporte aéreo balear, mientras que los consellers explicaron que podría estar listo «en un plazo quizá no superior a los dos meses».

Quetglas recordó que el Govern balear plantea la necesidad de establecer «un régimen que garantice unas frecuencias, un número de asientos y, sobre todo, unas tarifas adecuadas para los vuelos interinsulares y en algunas conexiones estratégicas con la Península, en los mismos términos que están señalados en Canarias».

En todo caso, el conseller no descartó la posibilidad de conseguir la declaración de servicio público en algunas conexiones con la península, aunque recordó que la obligación del Gobierno, según la Ley de acompañamiento de los Presupuestos Generales del Estado del año 1998, afecta sólo a las rutas interinsulares.