Los datos que contiene el último informe del Govern sobre población que ha decidido darse de alta en los censos de Balears revelan que 1.289 ciudadanos extranjeros se empadronaron en las Pitiüses, mientras que ninguno de baja, siempre según el último censo que maneja el Ejecutivo balear (2001). En ese período se registraron 3.313 altas de residentes procedentes de otras comunidades autónomas del estado mientras que se produjeron 1.530 bajas lo que supone un balance positivo de 1.783 personas más inscritas en los diferentes municipios.

Otro dato que contiene el estudio es el número de altas que se han producido en las Pitiüses de personas residentes en Balears y que han cambiado su lugar de residencia a Eivissa y Formentera procedentes de Mallorca o Menorca. En este caso hubo 1.599 altas. Por otra parte hubo 1.637 bajas, por lo que son más los residentes en Balears que se han ido fuera de las islas que los que se han dado de alta en el total del censo. Como balance, han sido 6.201 las altas y 3.034 las bajas, por lo que el balance es de 3.034 personas más inscritas en los diferentes censos pitiusos.

Del total de 3.034 altas, el grupo más numeroso corresponde a españoles, es decir, procedentes de otra comunidad autónoma, que fueron 1.498 altas. Los alemanes son el grupo de extranjeros que más se empadronaron en los censos de las Pitiüses, con 241 personas más inscritas en 2001. Otras nacionalidades relevantes por número son los 132 argentinos que se empadronaron, los 173 colombianos, los 202 ecuatorianos, los 154 italianos, los 127 marroquíes, los 108 británicos, los 36 rumanos y los 26 uruguayos que pasaron los trámites de empadronamiento. Entre las nacionalidades que aportaron una persona más está la siria, la ruandesa y la pakistaní, entre otras.