La segunda quincena de mayo ha recuperado un tanto los malos resultados de los primeros quince días del mes. Sin ser datos como para lanzar las campanas al vuelo, las cifras recogidas por la Federación Empresarial Hotelera corroboran que los últimos quince días han compensado el penoso inicio del mes pasado.

Un caso claro es el de Formentera. Si en la primera quincena de mayo contó sólo con un 27 por ciento de la planta ocupada; en la segunda el dato subió al 61 por ciento de las plazas, lo que deja la media del mes en el 44,5 por ciento.

La ocupación en el conjunto de las Pitiüses ha estado al 52,7 por ciento en mayo. Por zonas, Eivissa ha tenido los hoteles al 55,6 por ciento de ocupación; las calas de Sant Josep al 44,1; Sant Antoni al 47,6; la zona norte de la isla, al 58,4; y Santa Eulària también al 58,4. En todos los casos las cifras de ocupación son inferiores a las registradas en el mismo mes del año pasado pero no tan malas como las que eran de esperar con un inicio de mayo tan flojo.

A la vista de las cifras, Pedro Matutes, presidente de la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera, lo tiene claro: «Cada año se pierde más en los inicios de la temporadas y lo que es evidente es que se confirma la tendencia de que cada vez se está estacionalizando más». Los hoteleros son algo más optimistas con el mes de junio.

«El mercado se va normalizando y por las conversaciones que se ha tenido con los touroperadores la Federación Empresarial Hotelera constata que a medida que pasan los días el mercado turístico se estabiliza», afirma Matutes, que recuerda que se llega de una época complicada, entre otras cosas por el reciente conflicto bélico.

Matutes dice que no se atreve a augurar que el anuncio de la retirada de la ecotasa vaya a tener consecuencias positivas a corto plazo. «Puede tener un efecto a medio plazo, cuando cale en el mercado», dice.