La reivindicación de la identidad

Los miembros de la comisión de fiestas de Santa María, las fiestas de la tierra en conmemoración de la conquista catalana en el siglo XIII, presentaron ayer un denso programa de actos con los que se reivindica la identidad de los formenterenses al tiempo que se quiere hacer partícipe a toda la población de unos días en que historia, cultura, juventud, tradición y fiesta se dan la mano de forma amena, didáctica y participativa.
Las fiestas de Santa María, las fiestas de la tierra quieren ser «un año más las fiestas de todos -indicó Jordi Ferrer, portavoz de la Comisión Organizadora de los actos-, que llegue a todo el mundo intentando englobar un gran número de actividades y sobre todo fomentando los valores de las islas que pensamos, en los últimos años y a resultas de la presión mediática y turística se han estado desvirtuando y perdiendo presencia quedando en segundo término».
«Queremos que nuestras costumbres y nuestras tradiciones sigan adelante y queremos que la música en catalán, un valor al alza, se mantenga ya que es la música que se hace en nuestra lengua», dijo Ferrer para a continuación enumerar los conciertos que centrarán el espectáculo musical, Siamb, Andreu & Els Rumberus y Dusminguet la noche del día 4 y Quico el Celio, el noi i el mut de Ferereries, Bèsties Xeremiers y Pota Lait la noche del día 5, actuaciones que tendrán lugar en la plaza de Sant Francesc mientras que el nueve por la noche y la plaza de Sant Ferran tendrá lugar la Nit Electrónica .
Además una misa cantada por 'Capella Antiqua', el Correllengua, cantadas payesas, cucañas infantiles, representaciones teatrales, exposiciones, limpieza de playas, fotomaratón, lecturas poéticas y los talleres de baile payés y el de elaboración de espardenyes a la manera tradicional conforman un programa amplio y sugerente cuyo coste ronda los 25.000 euros. Respecto al presupuesto, la Comisión de Fiestas ha señalado que sus fuentes de ingresos se limitan a las rifas, donaciones de comercios y empresas y ventas en los bares que se instalan durante las fiestas y aunque han asegurado que confían en la ayuda institucional, tienen serias dudas sobre la cuantía de esta ayuda que puede poner en situación delicada a los organizadores. G.R.