La prescripción de medicamentos antidepresivos y tranquilizantes
fue, con un 11 por ciento, el segundo tipo de recetas que más
aumentó el año pasado en la sanidad pública de las Pitiüses, por
detrás de las medicinas para combatir el colesterol (17,6 por
ciento).
Los medicamentos para atender problemas del sistema nervioso
abarca el 21 por ciento del total de las recetas médicas en las
Pitiüses, sólo por detrás de los fármacos para paliar las
enfermedades del corazón (22,5 por ciento). Las prescripciones de
estos últimos aumentó el año pasado en un 7,7 por ciento. En total,
se recetaron 200.553 envases.
Por otro lado, en 2002 disminuyó curiosamente en un 7,6 por
ciento (48.597 envases) las recetas de antibióticos y otros
medicamentos aptos para paliar las infecciones del organismo.
El aumento de las prescripciones médicas para aliviar los
problemas de salud mental es parejo al incremento de ingresos en el
hospital por psicosis. Esta causa figura en cuarto lugar dentro de
la lista de procesos de hospitalización durante 2002. El año pasado
Can Misses facilitó el alta a 241 pacientes que padece psicosis
frente a las 192 altas de 2001. La estancia media en el hospital de
estos pacientes es una de las más altas.
Los recursos sanitarios de los que dispone el Ib-Salut para
atender a los enfermos mentales son insuficientes. El hospital
cuenta con una unidad de hospitalización para casos agudos, con 18
camas, y con una unidad de salud mental para atender a la población
sanitaria, así como el hospital de día psiquiátrico de es
Viver.
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