Los alojamientos turísticos de Balears representan más del 40 por ciento del consumo eléctrico total de las Islas, según un estudio realizado por el ingeniero industrial Jeroni Cabot y presentado en la Universitat de les Illes Balears.

Los establecimientos turísticos suponen casi la mitad de la demanda eléctrica de Balears, teniendo en cuenta que en los últimos diez años se ha registrado un incremento del 60 por ciento en el consumo energético de nuestra comunidad.

Aire acondicionado
El informe también indica que, durante los meses de mayor afluencia turística, se produce un incremento del 150 por ciento en el consumo eléctrico, por tres causas fundamentales: la mayor actividad económica, el uso progresivo del aire acondicionado y el aumento de la ocupación hotelera.

Cabe señalar que una mayoría de establecimientos turísticos continúa dejando el control absoluto del aire acondicionado a los clientes y no aplica medidas de ahorro, o al menos no lo hace de manera eficiente.

Un uso más racional y eficiente de la energía consumida por los hoteles supondria un ahorro considerable para el conjunto de Balears.

Esta situación se refleja en la distribución sectorial del consumo final de energía eléctrica. En Balears en general y en Mallorca y en Pitiüses en particular, el sector comercio-servicios, que incluye la hostelería, es el mayor consumidor de electricidad. Sólo en Menorca se ve superado por el residencial, aunque por muy poca distancia.

Resgistros récords
Sin embargo, el año que ahora finaliza ha presentado la singularidad de registrar récords históricos de consumo de gas y electricidad en pleno invierno, y además por dos días consecutivos, el 18 y 19 de febrero. Hasta aquel momento, era un hecho inédito que una punta de consumo en invierno superase incluso las tradicionales máximas del verano. El 19 de febrero se superó la «barrera psicológica» de 200 toneladas de gas propanado consumidas. El frío de aquellos días resultó determinante para que se lograran estos registros.

No obstante, el pasado verano puso las cosas en su sitio, teniendo en cuenta la tendencia de incrementos extraordinarios durante los últimos años, y se volvieron a batir los registros históricos de consumo.