CLAUDIA ROIG
El Pacte calificó ayer de «destrozo» la ubicación de un depósito temporal de vehículos y punto blanco para la eliminación de electrodomésticos en un terreno rústico muy cercano a la carretera de Sant Josep. Esta instalación, que abarcará 22.000 metros cuadrados y estará situada en el kilómetro 6 de la vía, está promovida por la empresa Aggeve Pitiusas y está pendiente de una declaración de interés general que tiene que otorgarle el Consell para poder funcionar.

La portavoz del Pacte en la máxima institución pitiusa, Pilar Costa, explicó ayer que este proyecto ya cuenta con el visto bueno del Ayuntamiento de Sant Josep y con un informe positivo del departamento de actividades clasificadas del Consell. Los progresistas no se oponen a este depósito pero ponen pegas a que se ubique en suelo rústico. «Este suelo no está para esto», dijo Costa, que consideró que el lugar indicado para este tipo de instalaciones es el suelo industrial. Además, se trata de una zona en la que hay viviendas unifamiliares y pequeños negocios, que pueden verse perjudicados. «Al final se está utilizando el suelo rústico para cualquier uso y toda la protección que dice Palau que hay en el PTI se puede cambiar con declaraciones de interés general, que pueden llegar a ser un coladero en el que quepa cualquier cosa», dijo la portavoz progresista que no comprende cómo se puede justificar una actividad privada de estas características en un terreno así.

En sentido similar se pronunció el portavoz del Pacte en el Ayuntamiento de Sant Josep, Josep Marí Ribas, Agustinet, que denunció el «absoluto oscurantismo» con el que el Consistorio dio su visto bueno a este proyecto ahora hace ya un año. «Lo aprobaron argumentando que era necesario para la eliminación de electrodomésticos, cuando el trozo que destinan a esto no llega al 0,50 por ciento de los 22.000 metros cuadrados del proyecto; sólo 92 metros están destinados a este supuesto punto blanco municipal», explicó Marí Ribas.

Pilar Costa confió en que finalmente esta instalación no se llegue a hacer y por eso presentarán una moción en el próximo pleno en la que piden que no se le dé permiso. «En caso de autorizrse, este depósito sería una nueva agresión inaceptable en suelo rústico», dice Costa, que recuerda que es una actividad molesta y contaminante y que no hay ningún estudio sobre el efecto que puede tener sobre los acuíferos.