A pesar de que la Sala de lo Contencionso Administrativo de Palma de Mallorca debe resolver el recurso interpuesto por varias asociaciones de taxi y por el Ayuntamiento de Eivissa contra el Consell Insular, Guasch señaló que no es impedimento para continuar con la tramitación de estas licencias temporales. Una vez que se resuelvan los casos administrativos, la máxima institución insular podrá continuar con la gestión de estas licencias temporales o, si la decisión es negativa, deberá paralizar el proceso.
Aún así, el conseller de Transports señaló que actualmente está pendiente de reunirse con los miembros de las distintas asociaciones de taxis para acordar las tarifas de los vehículos así como para gestionar la implantación del GPPRS en los taxis de todos los municipios. Tras estas reuniones, y cuando empiecen a cerrarse estos temas, la máxima institución insular deberá centrarse en la concesión de las licencias temporales para los meses de verano.
El pasado año, el Consell Insular autorizó veinte licencias temporales con un mes de vigencia para evitar las colas en las paradas durante los meses de temporada alta. Todos los municipios, salvo el de Eivissa, que rechazó doce, las aceptaron. En este sentido, el Ayuntamiento de Vila y los taxistas del municipio denegaron aceptar las concesiones por entender que la máxima institución insular invadía las competencias municipales, ya que debe ser la administración municipal la que conceda estas autorizaciones, mientras que la institución supramunicipal otorga las tarjetas de transporte.
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