Agencias29/04/07 0:00
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El presidente del PP, Mariano Rajoy, pedirá explicaciones en el Congreso al presidente del Gobierno sobre el supuesto cobro de comisiones por parte del PSOE en el proyecto Eivissa Centre, tras lo cual denunció que con los socialistas en el Gobierno la corrupción «vuelve a ocupar las páginas de todos los periódicos». Rajoy pidió a Zapatero que explique por qué han aparecido «unas cintas de 12 horas en las que sólo se habla de comisiones de millones y millones», que supuestamente percibió el PSOE como soborno de la constructora Brues. En todo momento el líder popular optó por «hacer preguntas» sobre el caso y no «afirmaciones», con el objetivo de evitar que le acusen de crispar. Así, en el «tono moderado» que dijo que le caracteriza, preguntó «sin ánimo de molestar». «Preguntar eso no es crispar», insistió con ironía Rajoy, cuya alusión al caso fue correspondida por los asistentes al acto con gritos de «Zapatero, dimisión».

También el presidente del Govern, Jaume Matas, se refirió a este caso para afirmar que no lo utilizará para destruir al adversario en la batalla electoral. «Si nosotros fuéramos como ellos haríamos una sangría, habríamos montado un acto de rencor, de revancha, pero no lo somos», afirmó Matas en un acto electoral en el que también estuvo el portavoz popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, quien calificó el caso de «espectáculo bochornoso» y augurar que «seguirá coleando». Recordó las palabras del ex ministro de Justicia acerca de la existencia de «muchas Marbellas» en Balears y sugirió que quizá «ya sabía lo que habían hecho los suyos en Eivissa».

El portavoz del grupo socialista en el Congreso, Diego López Garrido, comparó el viernes en Palma el caso de Eivissa con el de los dos tránsfugas que fueron comprados por el PP para evitar que el socialista Rafael Simancas fuera presidente de la Comunidad de Madrid. También el secretario general del PSOE de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, afirmó que «pone la mano en el fuego» por el secretario de Organización del PSOE al que se la ha vuelto «a calumniar y a difamar desde el diario El Mundo y desde la COPE».