El sector más duro del PSM se impuso ayer en el Consell de Direcció, el máximo órgano entre congresos, y obligó a los negociadores del partido a utilizar un tono sumamente crítico a la hora de valorar el estado de la negociación del pacto y a dejar en el aire el sentido del voto del Bloc (donde participa el PSM) a la hora de elegir la presidencia del Parlament.

UM y el PSOE ya han pactado que Maria Antònia Munar presidirá a partir del martes el Parlament y que este punto se incluirá en el acuerdo que se cerrará el lunes.

Biel Barceló, secretario general del PSM, señaló tras el Consell de Direcció que si no hay acuerdo tampoco se garantiza la elección de Munar. Expresó su voluntad de llegar a un acuerdo y, ayer mismo, continuaron las negociaciones.

Delegaciones del Bloc y del PSOE se reunieron en la sede de este partido y hoy podrían volver a hacerlo. El PSOE ofreció al Bloc la nueva Conselleria de Movilidad, que gestionará el tren y el sistema de transportes isleño, a cambio de que desistan de su idea de llevar Educación, que quiere el PSOE. La Conselleria de Movilitad es importante ya que el transporte público será uno de los ejes del Govern.

Las áreas
El Bloc, además de este departamento, llevaría Comercio e Industria y Servicios Sociales con Trabajo. EU (socio del PSM en el Bloc) aceptaría separar Trabajo de Servicios Sociales y dejarla en manos del PSOE si el PSM renuncia a Educación. No se puso sobre la mesa que el Bloc tuviera el senador autonómico.

Al mediodía, tras la reunión del Consell de Direcció, Joana Lluisa Mascaró mostró la queja del partido por el modo en que se han desarrollado las negociaciones. El sentir de los nacionalistas es que UM y PSM han cerrado un pacto que ahora ellos deben ratificar. Privadamente, tanto Mascaró como Barceló, dijeron que no quieren que gobierne el PP. Las reuniones y los contactos se mantendrán a lo largo del día de hoy a la espera de poder cerrar el acuerdo antes de mañana lunes.