Las alumnas y su profesora eligen un atuendo muy colorido y acorde con la clase para ensayar diferentes pasos de flamenco. Fotos: MARCO TORRES

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a Asociación de Vecinos de es Clot se mueve, y mucho, con los diferentes bailes que se desarrollan en su local social. Así, la oferta va desde bailes de salón, como salsa, merengue, cha-cha-cha, tango argentino, sevillanas hasta flamenco. Esta última danza se presenta con la compañía de las castañuelas y, en ocasiones, también con sevillanas. Por ahora, los alumnos y alumnas que asisten a flamenco están aprendiendo alegrías, un palo flamenco que, según cuenta su profesora, Victoria Balanzat, no les cuesta aprender: «Tanto las chicas que llevan unos tres días como Vicky, que acude a todas las clases, se desenvuelven muy bien con los diferentes pasos de este palo de flamenco». Dentro de algunos días Victoria y sus alumnos aprenderán a mezclar las alegrías con las soleás, algo más difícil: «Hay personas que cuando no les sale un paso se obcecan y lo repiten una y mil veces; les digo que de esa manera no sale». Sin embargo, asegura que es necesario machacar los pasos todos los días para no olvidarlos: «Poco a poco se van quedando los conceptos, pero es necesario practicar mucho». Para esta profesora la disciplina es importante, pero no olvida que el objetivo de estas clases es totalmente lúdico: «La gente, ya sea mayor o más joven, viene aquí a pasarlo bien, a moverse, a reír y a hablar con la gente». Una de las características por las que estas clases tienen tan buena acogida entre el vecindario es la amplitud horaria, pues las clases comienzan a las 20,00 y acaban a las 22,00 horas de lunes a jueves. También se imparten clases de informática y, próximamente, de manualidades.

María José Real