ivimos en un mundo lleno de gluten casi no apto para celíacos. Sin embargo, seguir la estricta dieta adecuada no es suficiente protección para los que padecen esta enfermedad. También hay que cuidar de forma exquisita la higiene de los utensilios, ollas y cocinas para evitar contaminaciones cruzadas. La industria no lo pone fácil y los productos elaborados, envasados o manufacturados son un peligro para ellos y no vale decir, «por una vez no pasa nada. Porque sí, pasa».

Esto lo saben muy bien en la delegación ibicenca de la asociación de Celíacos de Baleares y, por ello, han comenzado con una serie de charlas informativas dedicadas al personal de los comedores escolares, a docentes, monitores y padres de niños con esta enfermedad.

Uno de estos encuentros tuvo lugar precisamente ayer en el colegio S'Olivera y fue impartida por pediatra de Gastroenterología de Can Misses, Gemma Cardona, y por la nutricionista Loreto Carbonell. «La celiaquía es una enfermedad digestiva crónica, que es para toda la vida, e indica que tienes una intolerancia a las proteínas de algunos cereales», explicó la doctora Cardona, que informó a los presentes sobre los síntomas, las causas conocidas y el diagnóstico de esta enfermedad.

«Tiene la suerte y la desgracia de que no hay que tomar ningún medicamento porque con la dieta se puede curar, pero comporta mucha dificultad porque actualmente todo lo que está manufacturado está contaminado con harina de trigo», agregó la pediatra, que al llegar a Can Misses hace un año y medio recibió una verdadera «avalancha de pacientes» con esta enfermedad; una afección que tiene como mayor preocupación la posibilidad de derivar en cáncer de intestino.

«Buscamos concienciar de la importancia que tiene la dieta sin gluten. A simple vista parece una dieta sencilla de llevar, pero en la práctica es complicada», destacó, por su parte, la nutricionista Loreto Carbonell. «Además de que tienen que ser productos frescos es fundamental ser cuidadoso con la manipulación de los alimentos en las cocinas, porque no se puede utilizar el mismo material para la comida normal que para los niños celíacos. Por otra parte, las personas que cocinan estos alimentos tienen que ser muy exquisitos en su higiene personal porque un poco de harina en el delantal o en los guantes puede afectar», explicó. Los productos etiquetados con garantía, en su mayoría incluidos en el libro que edita la Asociación de Celíacos de España, también formaron parte de la charla informativa. lLuciana Aversa