J. L. M. Las nuevas Normas Subsidiarias de planeamiento urbano de Sant Josep establecen un crecimiento de suelo urbano del 7'9 por ciento, con un total de 769.000 metros cuadrados. Las zonas donde ese crecimiento es mayor son Platja d'en Bossa y Sant Jordi, aunque se registran crecimientos en todo el municipio. En los casos en que se ha optado por permitir el avance de la construcción los motivos son dotar de equipamiento, cohesionar el territorio o mejorar su configuración. Con todo, el equipo de gobierno de Sant Josep hace hincapié en que el porcentaje de zonas verdes supera al de suelo urbano, ya que se prevén 853.769 metros cuadrados de espacio libre público.

Así lo explicó ayer el teniente de alcalde de Urbanismo de Sant Josep, Josep Antoni Prats, quien remarcó que «si bien el suelo público crece, lo hace menos de lo que aumentan las zonas verdes». Prats señaló que en algunas de las zonas donde se produce un incremento de suelo urbano, también se reservan espacios para usos no lucrativos.

El concejal explicó a modo de ejemplo que en Sant Jordi se consigue nuevo equipamiento y espacio para la construcción de viales que contribuyan a aliviar el tráfico del centro del núcleo urbano. También aludió a la polémica urbanización de Roques Males (Platges de Comte), donde se ha reducido la edificabilidad a 5 viviendas por cada hectárea (55 en total) y con la mitad del terreno dedicada a zonas verdes, calles y otros equipamientos.

En la misma línea, Prats aseguró que en el caso de Sa Caixota "donde se declaran inedificables todos los sectores de pendientes elevados" «se mantiene la delimitación inicial pero con muchas zonas verdes».

El nuevo planeamiento contempla, por otra parte, cinco áreas concretas para la ubicación de viviendas de protección oficial en Cala de Bou y Sant Jordi, aunque el equipo de gobierno confía en liberar más terreno para este fin mediante aprovechamientos urbanos y la ley balear.

También define 57 hectáreas de núcleos rurales consolidados, 27 de las cuales se concentran en uno sólo (es Pujols). Se trata de ocho localizaciones que se han regulado para mantener sus configuraciones actuales.

Para los núcleos de Sa Revista y sa Canal (en ses Salines) se establecen planes especiales con la finalidad de clarificar usos y proteger edificios.
El planeamiento también reserva suelo para la construcción de una ronda de circunvalación del núcleo de Sant Josep y prevé un camino alternativo para conectar los dos lados de Cala Vedella.

Asimismo, muchos espacios urbanizables pasan a ser rústicos por su valor ambiental y al objeto de frenar el desarrollo urbanístico. Para ello, el equipo de gobierno se ha valido en varias ocasiones de leyes de rango superior o del agotamiento de plazos en determinados proyectos. Así, se protegen 300.000 metros cuadrados en Cala Tarida, 150.000 en Cala Molí y 330.000 en Cala Vedella, entre otras zonas. En es Cubells, el territorio protegido alcanza los 700.000 metros cuadrados