El conseller de Medi Ambient tuvo encuentros en Eivissa y Formentera, donde visitó la planta de tratamiento, que ahora ha duplicado su capacidad para atender a la demanda punta y corregir las deficiencias anteriores.

B. ROSELLÓ El conseller balear de Medi Ambient, Miquel Àngel Grimalt, anunció ayer que desde el Govern balear se acepta, a falta de los informes definitivos, el solar propuesto por el Consell Insular d'Eivissa para la construcción de la nueva depuradora de Vila.

La propuesta remitida por la máxima institución insular establece que las infraestructuras se ubiquen en los alrededores del Pla de Vila, en una finca perteneciente al municipio de Santa Eulària, pero sin concretar el lugar exacto para evitar despertar malestar entre el vecindario, según explicaron fuentes del Consell. «Aún no tenemos los informes definitivos pero la zona parece adecuada desde el punto de vista técnico», indicó Grimalt, que apuntó que los contactos con el consistorio de Santa Eulària corresponden a la máxima institución insular. Aún así, desde el Consell señalan que es una de las posibilidades que existen y se tendrá que ver si finalmente es la elegida.

El conseller balear señaló también que a lo largo de este año se realizarán mejoras en la actual depuradora de Vila para evitar problemas durante los meses de verano así como incrementar las inversiones para evitar el hedor tanto en los alrededores de las instalaciones como en su interior, según avanzó Damià Nicolau, director de la Agència balear de l'Aigua. «Existe una parte de la actual depuradora que se inauguró en 2003 que no se ha utilizado nunca y lo que haremos es mejorar las instalaciones para poder ampliar la capacidad de depuración», señaló Nicolau, que precisó que el total de estas obras no se podrán finalizar antes del verano. «Estamos redactando el proyecto y se presentará en el próximo consejo de administración por lo que antes de la temporada se ejecutará una parte de la inversión y después de verano se ejecutará el resto», según aclaró Nicolau.