La Conselleria de Medi Ambient investigará si hubo una mala gestión de los residuos en la acumulación de tierras de la autovía en el terreno perteneciente al Grupo Matutes y si se vertieron materiales contaminantes. No es la primera vez que Medi Ambient se fija en este asunto. De hecho, el 13 de marzo de 2006, durante la legislatura del PP, agentes de la Conselleria interpusieron una denuncia ante Fiscalía en la que aportaron fotografías en las que se apreciaban trozos de asfalto mezclados con la tierra. Esta misma denuncia fue a parar al servicio de gestión de residuos de la Conselleria, que hizo un requerimiento a la UTE constructora para que explicase qué estaba haciendo.

Según indicaron ayer fuentes de la Conselleria de Medi Ambient, el problema era que el plan director de la obra que había sido aprobado por la Comisión balear de medio ambiente no fijaba ningún lugar donde tirar estas tierras, sino que la misma empresa se había comprometido a triturar y a reutilizar todo el material para relleno. La UTE contestó entonces asegurando que aquello sólo era temporal y la Conselleria le volvió a requerir pidiendo más información. Nuevamente, la UTE le informó de varios lugares donde se depositarían los restos, siempre asegurando que sería de forma temporal.

En la Conselleria, entonces gobernada por el PP, les advirtieron de que tenían que volver a reutilizar el material y que tenían que dejar el terreno tal y como estaba, según desvelaron ayer fuentes de Medi Ambient.

Recientemente, el juez instructor del Juzgado número 2 de Eivissa, José Espinosa, pidió al Consell un peritaje sobre las tierras para averiguar si contienen material tóxico. Sin embargo, desde la máxima institución insular sostienen que no tienen personal para acometer un trabajo de estas características, por lo que lo más probable es que recomienden que quién lo haga sea la Conselleria de Medi Ambient.

Desde la Conselleria explicaron ayer que hablaron sobre ello con el Consell y se comprometieron a contratar una empresa para hacer un análisis de las tierras en caso de que se les solicite por parte de la Justicia. «Según dicen los técnicos, el asfalto sería contaminante sólo si tuviese hulla, que es un material tóxico que no se utiliza desde hace 25 años», expresó un portavoz de Medi Ambient, que añadió que en caso de que fuera así se tendría que abrir un expediente desde Medi Ambient por mala gestión de residuos.

Actualmente este tema está investigándose por la Justicia, por lo que Medi Ambient deberá esperar antes de abrir un expediente.