La directora insular, Sofía Hernanz, ha convocado una reunión urgente para hoy con el comisario de la Policía Nacional en Eivissa, Estanislao Pérez, y con el personal de la Casa de Mar para analizar las quejas sobre la falta de información, formación y el trato que los inmigrantes aseguran recibir por parte de estas administraciones y que han sido trasladadas al Defensor del Pueblo. Hernanz buscará conocer «de primera mano qué está sucediendo», según explicaron desde la dirección insular, y mañana mantendrá otro encuentro con las asociaciones de inmigrantes de Argentina, Uruguay y Paraguay, que representan al colectivo.

Por otra parte, la directora insular se puso ayer en contacto con la portavoz de las asociaciones, la presidenta de la agrupación de uruguayos, Alda Yurramendi, para comunicarle que ya había solicitado un informe sobre los diversos casos que se denuncian en el escrito y que tienen que ver con el desempeño de funciones de la Policía Nacional de Eivissa en materia de extranjería.

En este sentido, en la carta que firman 16 agrupaciones de la isla se presentan diferentes quejas sobre la Policía Nacional cuyo «personal de primera atención es siempre cambiante y sin experiencia, carece de formación y conocimientos de extranjería provocando situaciones de desinformación o graves confusiones al facilitar datos erróneos, confusos e incompletos que en innumerables casos han hecho perder la legalidad de inmigrantes», destacan. Uno de los ejemplos que citan en su escrito tiene que ver con el inicio de 40 expedientes de expulsión de personas que se presentaron en comisaría para solicitar la residencia: «En octubre del 2007 la policía de puerta dio cita y los formularios de pago de tasas a inmigrantes para solicitar la residencia como si tuvieran opciones de regularización aunque no reunían las condiciones. Se presentaron unas 40 personas para el supuesto trámite sin resultado ninguno, que además fue aprovechado para tramitarles expedientes de expulsión. Además con los datos obtenidos mediante esta confusión, policías de paisano requisaron domicilios generando nuevas expulsiones», detalla la carta. El escrito también contiene quejas de múltiples casos de remisión de personas a la Dirección Insular para solicitar información y de allí de vuelta a la policía y viceversa.