La empresa adjudicataria de Ibiza Nueva garantiza las condiciones laborales de los trabajadores

En este sentido, los 12 trabajadores fijos y 10 discontinuos que conforman la plantilla actual podrán continuar con su antigüedad correspondiente, categoría profesional y salario, así como con aquellos derechos derivados de su condición de empleados.

Esta decisión de la nueva adjudicataria del puerto deportivo es una respuesta al aviso por escrito que la actual encargada de gestión, Ibiza Nueva S.A, envió a Autoritat Portuaria, a Semar y a la plantilla de trabajadores y en el que «considera que la nueva empresa que asuma la gestión de los amarres deberá hacerse cargo de los empleados por aplicación del mecanismo previsto en el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores». A este respecto, Cardona señaló que, «aunque la Ley de contratos no diga lo mismo», subrogarán a todo el personal. «Lo que queremos es tener una entrada tranquila», agregó.

Por otra parte, Cardona indicó que desde la empresa espera comenzar con la gestión de los amarres el próximo viernes 18, ya que un día antes tiene previsto finalizar la autorización de gestión de Ibiza Nueva S.A.

Sin embargo, desde el punto de vista de Tomás Ruiz, actual director del puerto, «aún no está todo decidido». «Hay bastantes alegaciones al proyecto y puede ocurrir que alguna alegación tenga la suficiente fuerza como para retrasarlo», aseguró Ruiz, para quien el próximo viernes es un día clave: «O bien nos amplían una autorización de gestión, hasta que les den la adjudicación, o bien le dan a ellos directamente esta autorización», explicó.

Por último, Cardona señaló que el traspaso se puede retrasar «porque Ibiza Nueva tarde en sacar su material o en firmar el acta de rescisión»; «pero nosotros tenemos constancia de que el 18 entramos en la nueva concesión», concluyó el consejero.

Cardona explicó también que los que más le preocupa a la nueva empresa adjudicataria es el «mal estado de las instalaciones», debido a que, según aseguró, «actualmente están viejas y abandonadas». «No podremos poner en marcha nuestro proyecto de remodelación hasta después de la temporada, así que este verano tendremos que gestionar el puerto tal como está», agregó el consejero de Semar, empresa en la que participan el empresario ibicenco Alonso Marí Calbet y el madrileño Gonzalo Pascual, propietario del grupo Marsans.

En cuanto al proyecto de remodelación, la nueva concesionaria, que gestionará el puerto durante los próximos 17 años, tiene previsto reducir la cantidad de amarres para hacer sitio a barcos de mayor tamaño, pasando de 536 a 379 puntos de atraque. Las obras implicarán, entre otras actuaciones, el dragado de 78.798 metros cúbicos de fangos y la sustitución del muelle de Levante por un nuevo dique de hormigón en el que se instalarán los surtidores de combustible.