Más de un centenar de voluntarios participaron ayer en una jornada de limpieza a fondo celebrada en Cala Molí, la única playa de Sant Josep que este año prescindirá de hamacas para ofrecer un aspecto virgen.

Esta iniciativa, titulada Cala Molí, natural y sostenible, es una experiencia piloto del Consistorio que además prevé una serie de actuaciones para que el resto de playas del municipio sean también más ecológicas pero con servicios para el bañista.

«Estamos elaborando informes para ver qué actuaciones llevamos a cabo en temas como la limpieza, la instalación de baños o la accesibilidad, para que las playas sean naturales y tengan todos los servicios que se pueda», explicó la teniente alcalde de turismo, María Àngeles Mostazo. «Por ejemplo, en playas más urbanas como Platja d'en Bossa pondremos los baños conectados al saneamiento y en playas más naturales pondremos baños biológicos», agregó la concejala.

La jornada de limpieza comenzó muy temprano y contó con buceadores locales y de Mallorca, así como con voluntarios encargados de limpiar la costa.

Según los implicados en la limpieza, Cala Molí se encontraba en buenas condiciones y no se hallaron desechos de gran volumen, excepto unos neumáticos y dos hamacas en el fondo del mar. Aún así desde tierra se sumaron dos contenedores de basura, sobre todo de la planta invasora 'caulerpa taxifolia', llamada popularmente 'uña de gato', que afecta a toda la vegetación local y a las algas, sobre todo a las praderas de Posidonia. «Hemos visto que la Cala está limpia y está cuidada. Por eso lo importante de esta actividad es concienciar y hacer un seguimiento para que continúe así», explicó Xavier Casanovas, presidente de voluntarios sin fronteras.

El plieglo de condiciones para renovar todas las ooncesiones de hamacas de playas de todo el municipio se encuentra actualmente en fase de alegaciones. El documento ha sido publicado recientemente en el BOIOB, abriendo así un período de 20 días para presentarlas. Una vez termine el plazo, comenzará el concurso público, en el que tambien puntúa la antigüedad de los actuales concesionarios. Por otra parte, en Cala Molí se retirarán las dos concesiones de 70 hamacas cada una que había los años anteriores.

La limpieza de ayer contó con la participación de más de un centenar de personas, pertenecientes a cuatro grupos tanto de empresas como de voluntarios. Allí estuvieron los buceadores de la empresa Active Dive y dos equipos de Voluntarios sin Fronteras de Balears y del Grupo Ecológica Activa y de Estación Náutica. Entre todos desarrollaron una labor tanto de tierra como de mar, y contaron con equipamiento diverso y también con el apoyo de la Cruz Roja y Protección Civil.