Los productores locales de frutos secos, cereales y de ganadería no están pasando por su mejor momento. A la baja rentabilidad del sector se suma el envejecimiento de la población que ejerce este trabajo y el hecho de que las ayudas propuestas por las instituciones aún no han atraído al esperado relevo generacional. Y, si además se agrega el encarecimiento de los costes de alimento para ganado y de los abonos para los frutos, que han subido más de un 50%, el día a día se hace más complicado para los trabajadores del campo ibicenco.

Así lo asegura el presidente de la Cooperativa Agrícola de Sant Antoni, José Ribas Cardona, para quien es necesario «intentar por todos los medios involucrar a la gente joven, aprovechando todas las ayudas y los planes, como el plan de mejora de fincas y el Pla Desenvolupament Rural 2007/2013»; propuestas, destaca, «que están abiertas a todos los agricultores y a los que no lo son, algo muy importante», señala, porque puede animar a que gente nueva se sume al mundo de la agricultura y la ganadería. «El nuestro es el sector que más incidencia tiene en el paisaje y en la conservación del patrimonio rural y del entorno, por eso hay que buscar las fórmulas para que se siga cultivando y se siga manteniendo el campo», agrega.

En cuanto al relevo generacional, Ribas destaca que es un problema que también se extiende a España y a toda Europa, por eso espera también que el nuevo plan de formación de la Conselleria de Agricultura, sea un atractivo para los jóvenes de la isla.

Por otra parte, el presidente de la cooperativa, que agrupa a 1.500 agricultores y ganaderos de toda la isla, señala que, a pesar de todo, desde la cooperativa siguen «creciendo poco a poco, creando nuevos productos e intentando dar nuevas líneas de servicios a los socios».

Por ello, entre las actividades que realizan, el pasado domingo celebraron una asamblea general donde los socios pidieron la mejora del servicio de taller para maquinaria y la posibilidad cargar gasoil B en la misma cooperativa. «Una demanda que habrá que tener en cuenta para el futuro», agregó Ribas.

Por otra parte, la cooperativa está a la espera de la firma de un convenio con la conselleria de Agricultura para completar la mejora en infraestructuras que comenzó hacer tres años y en la que ya se ha concluido la obra civil del centro de recogida de cereales y de reformación en alimento para todo tipo de animales. «Ahora falta la parte de maquinaria para la sección de pesaje, molienda, envasado, paletizado, y unos cuantos vehículos para el manejo de los cereales y del pienso por dentro de la nave», explicó el presidente de la cooperativa, José Ribas Cardona, quien destacó que el convenio de más 400.000 euros se firmará «en breve».