La conferencia sectorial de cultura, que reunió a los consejeros de este ámbito político en Zaragoza, concluyó con la consellera Bàrbara Galmés reclamando un genérico impulso a la inversión en Balears, una imagen solapada con la dramática demanda del teniente de alcalde de Vila, Santiago Pizarro, al presidente Francesc Antich durante la reunión que a principios de mes se celebró en el Consolat de Mar y en la que Pizarro aprovechó para reclamar los siete millones que corresponden al Govern para completar la solicitud del crédito destinado a mantener y mejorar el Patrimonio de la Humanidad y para el que sigue sin haber un compromiso serio por parte de la Administración autonómica, curiosamente del mismo 'color político' que la municipal.

Pese a este 'desmarque' del Ejecutivo del consorcio que debe administrar y gestionar los valores históricos, desde el Consistorio de Vila tratan de quitar importancia al asunto destacando que «tanto el Consell como el Govern balear son plenamente conscientes de las necesidades que tiene Eivissa en cuanto al patrimonio y al núcleo histórico».

En este sentido, desde Vila no quisieron opinar sobre la actuación de Galmés en el encuentro que, según trascendió, no pidió financiación específica para proyectos concretos, cosa que sí hicieron representantes de otra comunidades, como Valencia y Murcia, logrando el apoyo del Estado en sus propuestas. Por ello, aunque desde Vila señalaron que el Ministerio de Cultura ya ha expresado «su buena predisposición» a colaborar en el consorcio, «aún no se ha concretado qué tipo de colaboración». Cabe recordar que hace meses la Junta Rectora de Eivissa Patrimoni de la Humanidad aprobó la modificación de sus estatutos para, por fin, y tras años de dar la espalda, incorporar como nuevo socio al Ministerio de Cultura. Todo un trasfondo importante para mantener la preocupación por el estado, mantenimiento y mejora del único núcleo histórico de Balears que ha sido reconocido por la Unesco.

Mientras tanto, y a pesar de no poder completar la petición de crédito de 21 millones entre Consell, Govern y Ayuntamiento, Vila mantiene su confianza en seguir adelante con sus proyectos y acaba de modificar partidas destinadas a otras actuaciones para desarrollar las obras que consideran «prioritarias» como es la remodelación del paseo Vara de Rey, las intervenciones en las murallas y portales, y la adquisición de un inmueble en la calle Gall de Sa Penya destinado a abrir un pasadizo.

A pesar de que el teniente de alcalde, Santiago Pizarro, haya aprovechado su oportunidad para reclamar a Antich los fondos necesarios del Govern para completar el crédito de 21 millones, con el fin de lograr así vía libre para la financiación de Eivissa Patrimoni, fuentes de Vila reconocieron ayer «que al parecer no podrá ser este año». En este sentido, poco sirvió que el teniente del alcalde recordara al Govern que sin su apoyo el Consorci no podrá pedir el crédito de 21 millones de euros que necesita Dalt Vila, el núcleo del Patrimonio de la Humanidad.