Villalobos y Burillo presentaron ayer en Eivissa el resultado de la Campaña de la Renta Foto: LAURA L. MARÍN

Los locales de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) en Eivissa, situados en la avenida Bartomeu Rosselló de Vila, se han quedado pequeños para poder asumir todo el trabajo que representa la Campaña de la Renta por lo que la Agencia Tributaria propondrá próximamente a los Ayuntamientos la posibilidad de establecer oficinas en cada municipio en la que se puedan presentar las declaraciones.

«Sería muy interesante que empleados de los ayuntamientos y del Consell pudieran ayudar a los ciudadanos a confeccionar y presentar sus declaraciones. Queremos realizar un pacto con el resto de Administraciones y vamos a buscar fórmulas novedosas para una isla en la que presentar la declaración supone una necesidad de desplazamiento para muchos ciudadanos», aseguró el Delegado Especial de Hacienda en Balears, Raúl Burillo.

El responsable de la AEAT en las Islas aseguró que en muchos lugares de España existen acuerdos similares «y los ciudadanos pueden presentar las declaraciones en sus Ayuntamientos, que se han ofrecido para prestarles ese servicio».

Burillo reconoció que todavía no han iniciado los contactos con los consistorios «porque todavía no hemos concretado un proyecto que les pueda resultar atractivo».

Otra alternativa es la de buscar, junto a Govern y Consell, unos locales más grandes que centralizaran tanto el servicio de Hacienda como el de 'Renta Àgil' de la Comunitat. «Queremos contar con un amplio local donde prestemos el servicio de presentación de declaraciones. Creemos que no habría ningún problema para que se sumara el Govern y que otras administraciones se sumen también, quizás destinando personal a la campaña. Nosotros nos encargaríamos de poner los medios técnicos, informáticos y la formación en materia tributaria», aseguró.

Por su parte, el Administrador de la AEAT en Eivissa y Formentera, José Teodoro Villalobos, definió las causas de los problemas de espacio. «Durante la campaña habremos atendido a unas 13.000 personas. Esto significa que hemos tenido que atender por la renta a unos 300 contribuyentes en cinco horas, pero que del resto de actividades administrativas hemos tenido otras 300 citas diarias, con lo que se ha tenido que soportar muchos días el paso de más de 600 contribuyentes por las oficinas, lo que supone una media de más de 100 personas a la hora», pormenorizó.

A falta de los datos definitivos de la Renta, en las Pitiüses se han presentado unas 55.000 declaraciones (de las cuáles unas 45.000 han sido ya procesadas) y que representan 33.000 resultados a devolver y 12.000 a ingresar.

La mayoría de las declaraciones negativas, más de 23.000, se han tratado y han supuesto que a los bolsillos de los ciudadanos hayan vuelto unos 15 de los 23,5 millones cotizados de más.

De las declaraciones que quedan por procesar, la mayoría son positivas y la Agencia Tributaria espera que representen unas obligaciones de pago al Estado por valor de unos 37 millones de euros, por lo que la Campaña de la Renta habrá supuesto para la Administración un 'beneficio' de unos 13,5 millones.

El representante de Hacienda en Balears evitó dar cifras sobre el posible fraude detectado durante la campaña, aunque aseguró que «entre un 2% y un 3% de las declaraciones presentan errores» y que la abundante información de que dispone la AEAT hace «que los contribuyentes ya no tengan la excusa de que se habían olvidado de algún ingreso o cuenta».

Respecto a la crisis, Burillo consideró que «no es previsible que se traduzca en un incremento del fraude fiscal».