La top más familiar

a modelo británica Kate Moss sigue disfrutando en Eivissa de sus vacaciones veraniegas. En esta ocasión, la top paseó por las calles del centro de Vila y aprovechó para realizar algunas compras.

Su hija Lila Grace la acompañó en esta jornada y ambas acudieron juntas a una heladería muy céntrica. Allí, probaron diferentes helados hasta encontrar el preferido de la hija de la modelo.

Moss ha declarado recientemente que Eivissa supone un lugar de evasión para ella en el que asegura que se siente muy feliz. Aquí puede disfrutar de la tranquilidad de la isla y de las discotecas pasando desapercibida. Atrás quedaron ya las polémicas y a juzgar por su saludable aspecto, la modelo atraviesa un momento dulce tanto en lo profesional como en lo personal. L.T.