Imagen de la carretera de Sant Miquel, donde resulta fácil construir los viales ciclistas.

El Consell quiere apostar decididamente por la construcción de viales ciclistas y por el alquiler de bicicletas con un sistema similar al Bicing de Barcelona. Para conseguirlo, todos los proyectos cuya financiación han solicitado al Ministerio de Fomento a través del convenio de carreteras incorporan viales para bicis.

Los primeros trazados que ya están prácticamente elaborados son los de la carretera de Eivissa a Sant Miquel y Sant Joan. «En la de Sant Miquel es fácil de hacer, pero en la vía de Sant Joan es más complicado porque hay más casas y hay que ir buscando caminos por detrás», explicó el conseller de Mobilitat, Albert Prats, que aclaró que estos viales ciclistas irán separados de la vía principal por una valla bionda.

Las carreteras que el Consell quiere que se financien a través del convenio son las de Eivissa a Sant Joan, Sant Miquel, Santa Eulària y Sant Carles, además del primer tramo de la carretera de Sant Josep hasta Can Sifre, la carretera de ses Salines, el triángulo de Jesús y la vía de Sant Miquel a Sant Antoni.

Autovías

Mucho más difícil es el encaje de estos viales en las carreteras que ya se han renovado recientemente, como por ejemplo la autovía al aeropuerto. En algunos tramos es «imposible», como por ejemplo en la trinchera, por un «tema de seguridad». De todas formas, Prats asegura que se podría poner un carril bici a la altura del camino viejo de Sant Jordi yendo hacia ses Salines. «Por esa franja habría conexiones entre Vila, Platja d'en Bossa y ses Salines», explicó el conseller, que indicó que este tipo de actuaciones ya se tendrían que acometer con fondos propios del Consell, ya que el convenio de carreteras del Ministerio de Fomento tan sólo subvenciona nuevos proyectos, en los que de paso se pueden incluir los viales ciclistas.

Esta semana la máxima institución insular presentó al Ministerio todo el listado de proyectos con su cuantía y periodificación. «Ahora nos tienen que responder», explicó Prats, que recordó que es muy difícil que les den la potestad de controlar y licitar la obra, algo que reclaman desde el Consell. «Hemos insistido que para nosotros es muy importante, por todo lo que ha pasado, y ellos estudiarán ahora si puede ser por encomienda de gestión», añadió.

Paralelamente, el Consell también trabaja en la implantación de un sistema de alquiler de bicicletas. Para ello, Prats ya ha planteado a los ayuntamientos la posibilidad de crear un sistema conjunto de todos los municipios. «Hay muchos métodos diferentes, en unos se alquila con un mensaje sms que desbloquea la bici, en otros hay que pagar una cuota mensual con una tarjeta que tienes que acercar a un lector y otros funcionan a través de la zona azul», explicó Prats, que indicó que lo ideal sería que todos los municipios tuvieran el mismo para que por ejemplo se pudiera coger una bici en Jesús y devolverla en Vila. De hecho, los alrededores de Eivissa (Sa Carroca, Puig d'en Valls) son los que tienen más potencial.

Según el conseller, la reacción de los regidores fue buena. Eivissa es el municipio que tiene el sistema más avanzado, y luego los otros ayuntamientos podrían unirse «a través de subvenciones», porque este tipo de iniciativas tienen que ser «municipales». «Otros municipios también lo vieron bien, de hecho Sant Antoni ya alquila bicis a cambio de 50 euros que se retornan una vez se devuelve, aunque esto es más complicado porque necesita de un horario de atención al público», añadió.

Uno de los modelos en los que más se está fijando el Consell es en el consorcio de transportes de Sevilla, que ha impulsado un proyecto de bus y bici. Se trata de poner aparcabicis y alquileres de bici en las paradas de autobús para que luego los usuarios puedan alcanzar su lugar de residencia en bicicleta. «Es un sistema que nos iría muy bien porque tenemos una población muy diseminada», explicó Prats, que indicó que de esta forma sólo hay que tener una tarjeta de transportes con la que gratuitamente se podría utilizar el bus y alquilar bici. «Por ejemplo, si hubiera una línea de autobús de Vila a Sant Joan, pero no entrara en Sant Llorenç, se podría poner un aparcabicis en Sant Llorenç y en la parada de Sant Joan y la gente se podría desplazar en bici y luego coger el autobús», explicó el conseller. El impulsor de este proyecto, Armando Fidel Gutiérrez, gerente del consorcio de transportes de Sevilla, estuvo el viernes por la tarde en Eivissa para explicar este sistema en una conferencia, dentro de los actos de la Setmana de la Mobilitat Sostenible.

Prats destacó que este modelo tiene mejor fama que el de Barcelona, pese a que éste último es más conocido.

Al Consell le gustaría que el sistema de alquiler de bicis que se implante pudiera utilizar la infraestructura de la zona azul, que ya cuenta con canalizaciones de luz. «Es algo que tenemos que hablar con los ayuntamientos porque además se tendrían que desafectar aparcamientos de zona azul para poner aparcabicis con este sistema», explicó el conseller Prats, que apuesta por ir poniendo bicis en la calle para que su uso se popularice y las administraciones se vean obligadas a construir más viales bici. De todas formas, reconoció que en algunos pueblos hay «urbanismos complicados» que dejan poco espacio.