El 22 por ciento de las aves de Balears tienen algún nivel de amenaza, según la direcció general de Protecció d'Espècies del Govern balear. La situación ha mejorado ligeramente respecto al año 2000, cuando había un dos por ciento más de aves amenazadas. La situación de las Islas se puede considerar dentro de la media, ya que a nivel mundial el número de aves amenazadas es del 20 por ciento, mientras que en España el porcentaje se eleva al 25 por ciento.

En el caso de Balears, las aves que se encuentran más amenazadas son el virot petit, el bitó, la rosseta, el ànnera de cap blanc, el àguila peixetera y el milà reial.

'Virot petit'

En el caso concreto del virot petit, se está desarrollando un plan de recuperación, cuya principal acción es la desratización para evitar que las ratas se coman los huevos. Los gatos también suponen un peligro importante para esta ave marina. En la actualidad hay unos 12.000 virots gracias a los buenos resultados que está dando el plan de recuperación. Sin embargo, no se ha conseguido incrementar las colonias reproductoras, sino que incluso han descendido.

El bitó, la rosseta y el ànnera de cap blanc forman parte de un plan de recuperación, en el que también están integrados la fotja banyuda y el toret. Se trata de unas especies de zona húmeda escasísimas, que sólo se encuentran en s'Albufera. Por ello, la Conselleria de Medi Ambient está realizando una inversión muy importante para mejorar su hábitat, incrementando las aguas abiertas en la zona alta del parque. Además, a principios de 2009 está previsto soltar ejemplares de rosseta y fotja banyuda criados en cautividad con la finalidad de reforzar las poblaciones. Esta actuación se realizará de forma conjunta con la Comunitat Valenciana.

Medi Ambient también ha iniciado este año un plan de acción con el àguila peixetera con la finalidad de mejorar la reproducción. Además, a medio plazo se pretende reintroducir esta ave en las Pitiüses, donde se extinguió en los años 70. En 2008 se han registrado 15 parejas en las Islas: ocho de ellas en Mallorca, cuatro en Menorca y tres en Cabrera.

El milà reial es una de las prioridades del departamento que dirige Miquel Àngel Grimalt. Este año se han detectado 29 parejas, casi el doble que hace ocho años cuando comenzaron las actuaciones de recuperación. El veneno y la electrocución son las principales amenazas de estas aves.

Alicia Mateos