Es ibicenco pero nació en la ciudad Condal en 1973. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona, y allí, a la edad de 26 años, comenzó también su militancia en la organización de Pascual Maragall, Ciutadans pel Canvi. En el 2.000 se afilió al PSOE en Eivissa. Fue asesor de vicepresidencia del Consell en el gobierno del Pacte, trabajó de abogado y también de abogado municipal, y actualmente es concejal de Vivienda y Núcleo Histórico. Marc Costa, el nuevo secretario general de los socialistas de Vila asegura que ya se puede dejar de hablar de corrientes dentro de la formación y que la integración en una misma ejecutiva de los tres sectores con aspiraciones dentro del partido como son el de Pedro Campillo y Antonio Roldán; de Carlos Rubio, y el suyo con María Torres, les hará seguir en el camino de la unidad. El PSOE de Vila pasa página y Costa deja atrás con «un ejercicio de responsabilidad y generosidad» las diferencias que se hicieron manifiestas en las pasadas elecciones.

-¿Fue duro el esfuerzo para llegar a la unidad?

-Todas las partes tenían pretensiones legítimas y finalmente hubo un acuerdo basado en la responsabilidad y en la generosidad. Es normal que los militantes quieran aspirar a tener un cargo en el partido y, aunque todos los sectores tenían sus intereses, al final entre todos hemos sabido llegar a un acuerdo que beneficia al partido de la ciudad y a la organización en su conjunto.

-¿Qué contrapartidas ganó cada sector en este acuerdo?

-En cada negociación todos tenemos que ceder un poco, y con los desequilibrios que teníamos en la agrupación de Eivissa estábamos obligados a tratar de ver dónde cada uno podía desempeñar mejor su papel. Por eso hemos intentado que cada uno de los sectores que tenía intereses en optar a la secretaría general de la agrupación vieran representadas sus intenciones de una forma equilibrada dentro de la comisión ejecutiva.

-¿Y todo estos intereses integrados en la ejecutiva no van a dificultar las tomas de decisión?

-Muchas de las personas que la conforman son personas nuevas y al final de lo que se trata es de hacer en equipo, de trabajar en grupo y de trabajar de una manera solidaria. Y, sobre todo, un trabajo interno de adhesión, de mantenimiento e información de la militancia. Hay muchas cosas para hacer dentro del partido, sobre todo, para seguir potenciando y aumentando los canales de comunicación con los militantes, porque considero que ser militante de un partido político es una responsabilidad y un plus de ciudadanía. Pero vamos a ser una ejecutiva con libertad de acción.

-Entonces se podría decir que la formación está en un momento de pasar página después de las últimas elecciones, en la que incluso hubo un episodio desagradable con el hijo de Antonio Roldán, el secretario general saliente. Un incidente con enfrentamiento verbal y empujón incluido ¿Cómo se supera una diferencia tan manifiesta?

-Como comentábamos se supera haciendo un ejercicio de responsabilidad y de generosidad. Y de pensar que si formamos parte de una organización que tiene más de cien años de existencia, una organización que ha ayudado y ha colaborado muchísimo para transformar la realidad social y económica de este país, tenemos la obligación de limar todas estas diferencias para ser lo más magnánimos posibles los unos con los otros.

-Sé que no quiere hablar de corrientes, pero la suya era conocida como la corriente de la renovación. ¿Qué cosas nuevas aportará a la formación?

-Pienso que hemos ya renovado, que se inició un camino de renovación a la hora de conformar las listas electorales tanto al Consell como al Ayuntamiento de Eivissa y creo que hemos seguido renovando con la configuración de esta ejecutiva en la que hay bastantes caras nuevas, en la que todos los grupos que, en cierto modo, competíamos, hemos aportado novedad, con lo cuál, creo que es la cristalización de un trabajo que comenzó con las listas electorales. Por otro lado, creo que la renovación es importante pero tenemos que tener en cuenta de dónde venimos porque en cierto modo continuamos con el trabajo que ya ha hecho mucha gente del partido.

-¿Cuáles van a ser los primeros pasos de la nueva ejecutiva?

-Ahora mismo, del último congreso nacional del partido se va a crear la figura del agente electoral, por lo que vamos a decidir quién va a jugar ese papel dentro de la ejecutiva. Esto es una persona o un grupo que va estar de forma permanente con los barrios para poder transmitir todas las sensibilidades a los compañeros que estamos gobernando. También tenemos que mantener la militancia activa.

-¿Cuáles son sus aspiraciones políticas?

-Mi máxima aspiración política en este momento es gobernar lo mejor posible la parcela de ciudad que me corresponde y mi responsabilidad sectorial de vivienda. Es mi máxima preocupación, y de hecho es, de momento, mi preocupación y obligación, por encima de todo.