M. JUNCOSA/C. R.

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, expresó ayer en Palma el «compromiso total» del Gobierno con Balears y aseguró que «esta será la legislatura de la modernización de las infraestructuras» de las Islas.

Tras entrevistarse durante más de dos horas en el Consolat de Mar con el president del Govern, Francesc Antich, las principales patronales de los sectores inmobiliario y de la construcción de las Islas y los sindicatos mayoritarios, la vicepresidenta afirmó que ese «total compromiso» del Gobierno con las Islas tiene un «claro reflejo» en los 736 millones de inversión prevista para este año en el archipiélago, 200 de los cuales se derivan de la disposición adicional novena del Estatut d´Autonomia de Balears y 214 del Plan de Estímulo de la Economía y el Empleo, el llamado Plan E.

La vicepresidenta reafirmó al mismo tiempo la voluntad del Ejecutivo en la firma de un nuevo convenio de carreteras para Balears por valor de 557 millones de euros y de otro de más de 440 millones para financiar la ampliación de la red ferroviaria de Mallorca y la construcción del tranvía de la bahía de Palma, al tiempo que anunció nuevas inversiones en puertos y aeropuertos que no precisó. «Será un espaldarazo definitivo a las infraestructuras de Balears», afirmó.

La también ministra de Presidencia no concretó la fecha de aprobación ni el crecimiento de los recursos de que dispondrá Balears con el nuevo sistema de financiación autonómica, si bien indicó que el Govern «va a mejorar mucho y los ciudadanos de esta comunidad van a estar en el lugar que les corresponde».

Como se recordará, el Govern balear exige una financiación adicional no inferior a 380 millones de euros anuales, que es la cantidad mínima que el Círculo de Economía de Mallorca ha calculado necesaria para que las Islas se sitúen en la media española en financiación por persona.

En estos momentos, también según los cálculos del Círculo de Economía, las Islas se sitúan a la cola de España en financiación por cápita, 21 puntos porcentuales por debajo de la media, pese a que los ciudadanos de las Islas son los que presentan una mayor aportación o capacidad fiscal.

Respecto a la reunión con sindicatos y empresarios de los diferentes subsectores de la construcción, la vicepresidenta afirmó que el compromiso del Gobierno con este sector es «sólido» y destacó que el Ejecutivo central está realizando el «mayor esfuerzo que se ha hecho nunca en España» para impulsar las viviendas de protección oficial, así como políticas de impulso de la rehabilitación y de infraestructuras

Por su parte, el portavoz del PP balear, Carlos Simarro, se mostró ayer «muy defraudado» por las palabras de la vicepresidenta, ya que considera que «no ha aportado absolutamente nada» a Balears.

El presidente de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef) y de Pime Balears, Mariano Riera, explicó ayer que durante la reunión le trasladó a la vicepresidenta la falta de transporte aéreo y marítimo con las Pitiüses. «Le he dicho que en Semana Santa no ha venido mucha gente por falta de comunicaciones y porque los transportes son carísimos, porque un billete Madrid Eivissa cuesta casi lo mismo (400 euros) que una semana en el Caribe todo incluido», señaló Riera, que asegura que De la Vega reconoció el problema y «tomó nota». También le expresó la preocupación que existe en Eivissa por la temporada turística y por el cierre de pequeños negocios, que no tienen continuidad generacional.

Además, le habló los problemas de liquidez que tienen las empresas y pidió mayor agilidad a la Administración a la hora de pagar sus deudas. El presidente de los empresarios estaba satisfecho por haberle hecho llegar estas inquietudes, aunque indicó que ahora «habrá que esperar los resultados». En la reunión también participó otro ibicenco, el vicepresidente de la CAEB Joan Bufí.