Todas las conselleries del Govern recortarán su gasto corriente (no dedicado a inversiones) y colaborarán en un fondo común que permitirá dedicar ese dinero a proyectos que supongan la creación de puestos de empleo, y proyectos de las conselleries de Turismo, Educació y Benestar Social, principalmente en todo los relativo al desarrollo en Balears de la Ley de Dependencia.

Dos conselleries, la de Hisenda y Presidència, han dejado ultimada esta semana la primera parte de un plan de austeridad que, según fuentes del Ejecutivo, tendrá su continuidad en los Presupuestos de 2010, que «serán de crisis», según se ha señalado a este diario.

El PSOE, que es el partido que tiene más conselleries, es el que más dinero recorta: unos 10 millones. El recorte en la conselleries del Bloc es, aproximadamente, de dos millones. La misma cantidad que las de Unió Mallorquina (UM).

Aunque oficialmente todavía no se ha comenzado a trabajar en los presupuestos del próximo año, lo cierto es que todas las secretarías de las conselleries saben que tienen que ir acortando al máximo lo que se conoce como «capítulo 2» y «capítulo 4», eso es, gasto corriente, dietas, desplazamientos, estudios y viajes) y trasferencias a las empresas públicas. Se trata de un 'plan de contención' de puertas para adentro, en el que se está dado instrucciones a todas las conselleries para ajustar 'aún más' sus presupuestos y eliminar los gastos suntuarios y que no estén justificados. Por ejemplo, el Govern, pese a algunas críticas, redujo casi en un 25% los actos programados para la conmemoración del Dia de les Illes Balears.

El procedimiento

Los nuevos cambios, en torno a 15 millones, se pueden realizar sin necesidad de volver a llevar al Parlament los Presupuestos actualmente vigentes, lo que si ocurre en los consells, donde las modificaciones de crédito precisan pasar por el pleno.

Precisamente, el Govern está «muy preocupado» por el endeudamiento de las empresas públicas y por ese motivo quiere dar la máxima prioridad a la nueva Ley del Sector Público. Esta ley está pendiente de ser aprobada para ser remitida al Parlament. Se trata de una normativa que establecerá mayores controles sobre todos los gastos.

El descenso de los ingresos previstos por la Comunitat Autónoma está en el origen de este plan de austeridad que ahora se va concretando. Esta caída supera el 30% y los impuestos más afectados son los de Actos Jurídicos Documentados y los de Transmisiones Patrimoniales, es decir todos aquellos vinculados al mercado inmobiliario.

Según ha sabido este diario, las diferentes conselleries han aceptado el recorte, incluidas las de UM y el Bloc. Una baza que se ha utilizado desde los negociadores de la Conselleria de Presidència (que se encarga de coordinar las actuaciones de las diferentes conselleries) es que Turisme y Benestar Social serán dos departamentos especialmente favorecidos en el reparto posterior de los 15 millones 'ahorrados'.

El Govern balear está a punto de cerrar el 'contrato programa' para IB3, la televisión autonómica, que arrastra un endeudamiento desde la época de Matas que «preocupa» en el Ejecutivo. La propuesta «ideal» del conseller d'Hisenda pasaría por establecer un tope de gasto anual «en torno a cincuenta millones» de euros. Antich se reunió hace dos semanas con Martorell para exponerle su propuesta.