El Consell de de Formentera invertirá en los próximos meses un total de más de 1,6 millones de euros, 1.662.662? concretamente, para hacer un lavado de cara radical del núcleo turístico de es Caló. El proyecto redactado por el arquitecto municipal Pere Roig, debe entenderse desde dos facetas muy distintas. En primer lugar el hecho de que con motivo de la conexión de las redes de agua potable y saneamiento que van desde la planta de es Ca Marí hasta el Pilar de la Mola, y de bajada, en el caso de las aguas residuales, hasta las conexiones de Sant Ferran, y en segundo lugar teniendo en cuenta este tipo de grandes obras, el Consell de Formentera ha decidido aprovechar las circunstancias para acometer el soterramiento de líneas aéreas, instalar mobiliario urbano, alumbrado público y aceras en la PM-820 a su paso por la localidad; al mismo tiempo se acometerá un sistema de semipeatonización con la instalación de un sentido único de circulación dentro de es Caló en previsión de la posibilidad de que en el futuro parte de dicho lugar sea absolutamente peatonal.

El conseller d'Infraestructures, Bartolo Ferrer, y el de Obres i Urbanisme, Bartomeu Escandell, se reunieron ayer con los vecinos del núcleo de es Caló para explicarles el proyecto, que saldrá a concurso en breve y que debe adjudicarse a mitades de noviembre para que los trabajos comiencen a finales de diciembre o principios de enero, ya que el plazo de de finalización es abril de 2010, justo antes de que comience la temporada turística. Ferrer señaló que el proyecto significa un paso muy importante para el núcleo de es Caló, emblemático por su entorno y la tranquilidad que le hace distinto del resto de los puntos turísticos de la isla, y afirmó que se trataba de una actuación imprescindible en la que como prioridad estaba proporcionar infraestructuras básicas e imprescindibles para es Caló como eran las conexiones de agua potable y la evacuación de aguas residuales.

Los vecinos que acudieron a la presentación, cosa que la prensa desconocía, hicieron numerosas preguntas sobre temas muy concretos que en algunos de los casos se referían al típico «que hay de lo mío» pero que por lo general se circunscribían a temas muy técnicos referentes a pendientes de las calles que han de arreglarse, a niveles de soterramiento de conducciones de aguas residuales y de la necesidad de instalación de casetas de bombeo y otros temas; tanto los políticos, Escandell y Ferrer, como el arquitecto municipal, Roig, señalaron que en algunos casos habrá que cotejar las cotas en cuanto a conducciones soterradas y evaluar algunas decisiones en concreto sobre la situación de dichos elementos complementarios que garanticen el buen funcionamiento de los sistemas de evacuación de aguas residuales así como el abastecimiento de agua potable.