Los libros son pequeños mundos en los que se cuentan grandes historias. No es extraño que las personas que son partidarias de la lectura, en época estival, aprovechen el hecho de que tienen más tiempo libre para poder sumergirse en otras realidades escritas. En las playas de Eivissa se puede ver a mucha gente que, mientras toma el sol o descansa en la sombra, aprovecha para leer su libro preferido.

Christina está tumbada al sol con una amiga suya: «Hoy he venido sólo con la toalla, pero me apasiona leer y más cuando llega el calor y voy a desconectar al mar. Me gusta leer de todo pero por estas fechas siempre escojo libros de géneros como el thriller o terror», comenta. Para ellas leer es una cuestión de cultura que «sirve para enriquecer tu mente y vaciarla de aquello que te preocupa». Aunque hay detractores que afirman que es una pérdida de tiempo leer en la playa, se puede combinar el placer de leer con otras actividades. Gabrielle es una defensora de la lectura playera: «Es lo mejor para personas que son un poco inquietas y se quieren poner morenas. No te tumbas en la toalla dos horas para ponerte morena cuando no tienes paciencia. Con un libro que te guste entre las manos puedes disfrutar mientras tomas el sol y no se te hace eterno».

Novelas de amor, terror, libros de auto ayuda, suspense, dramas, filosóficos... En la variedad de géneros cada uno puede encontrar su libro afín para que le acompañe en su jornada de sol y mar. Han evolucionado hasta tal punto que ahora también se pueden comprar libros 'acuáticos', la última moda para este verano. Estos libros están ideados para su lectura en el mar y puedes leer incluso debajo del agua. Aunque el concepto es raro, cada vez está más de moda; no obstante, no hay muchas personas que se decidan a comprarlos por su caro precio y porque les resulta más cómoda la lectura tradicional.

«La gente compra bastantes libros en verano porque al haber más tiempo libre se puede disfrutar de ese hábito con más tranquilidad», explica María, encargada de una famosa librería en Vara de Rey. No importa la edad, siempre viene alguien que compra uno para poder amenizar su visita a la playa. «Los niños siguen adquiriendo el Barco de Vapor con su infinita fantasía. También otros para colorear, pero que no son de lectura», puntualiza. Un libro en estas épocas es como un compañero que nos explica una historia que escoge cada uno. Entre los libros más leídos este verano se encuentran la trilogía por excelencia de este año: Los hombres que no amaban a las mujeres, La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina y La reina en el palacio de las corrientes de aire. «También ha habido muchas ventas de La soledad de los números primos y Goodbaye, España», concluye María.

Àngela Real