La segunda jornada del Festival de Escalada de Eivissa organizado por la escuela Ibiza Vertical, que se celebró ayer en el parque Reina Sofía, congregó a numerosos amantes de este deporte. La jornada fue dura, ya que la competición comenzó sobre las nueve de la mañana, cuando tuvieron lugar las primeras eliminatorias. En total participaron 40 escaladores que tuvieron que solventar las dificultades de los cuatro bloques. En la categoría femenina tan sólo participaron dos chicas, aunque según señaló Alejandro Pellegrino, uno de los organizadores, «hay muchas más mujeres escaladoras en la isla. Creo que no han venido por miedo escénico. Aunque es una competición el ambiente es muy familiar», explicó. Carol Romero, que escala desde hace poco más de un año, fue una de las dos participantes femeninas. «Los bloques son muy duros. La verdad es que hay buen nivel», comentó.

Poco antes de la seis de la tarde comenzaba la fase final y cuando los participantes se subieron a los distintos bloques, el resto animaba y apoyaba cada paso que se deba hasta el siguiente agarre. A pesar de que los escaladores estaban sumamente concentrados, lo cierto es que el ambiente era distendido. Durante toda la tarde se celebró la final que estaba prevista que concluyera sobre las diez de la noche, momento en que se entregarían los premios a los ganadores.

Entre los candidatos en la categoría de juvenil debutante se encontraba el actual campeón de la primera fecha del Circuito Pitiuso, Gonzalo Diez de 15 años que tan sólo lleva algo más de nueve meses escalando. A pesar de haberse lesionado en la fase eliminatoria se clasificó y pasó a la final. «Es bastante más difícil que la prueba que se hizo en marzo en Sant Josep aunque espero tener opciones de ganar», comentó. Javier Ordóñez y David García fueron otros dos de los jóvenes que pasaron a la final en su categoría. Uno de los participantes mallorquines, Fransesc Solivellas, también pasó a la final tras haber quedado en la eliminatoria en tercera posición.