Veamos por qué es famosa Malena Costa. Desde que tiene uso de razón ha querido ser modelo, y a fe que lo ha logrado. No es una top model, pero entre las buenas no desentona. Eso significa que podría desfilar en cualquier pasarela, incluso en Madrid y Barcelona.

Malena, además, ha participado en el programa Supermodelo, un reality que buscó a la mejor modelo de aquel año. Si mal no recuerdo, fue eliminada en penúltima ronda, quedando tercera o cuarta. El puesto da lo mismo, porque ¿se acuerda alguien quien ganó el concurso...?

Entendiendo que en Palma no hay tantas posibilidades de trabajar como en Madrid, hizo el petate y se largó a la capital, a probar fortuna. Mientras tanto se hizo azafata y ahí conoció a Javier Hidalgo, con el que entabló una relación sentimental que ahora parece estar más que consolidada. Hubo, hace unos meses, un bache, pero ya está salvado.

Malena sigue trabajando como modelo, más que de pasarela, fotográfico. Lo último que hemos visto de ella han sido unos trabajos para una firma. Y a nada que sus compromisos se lo permiten, regresa a Palma y de la mano de Hexel participa en desfiles.

Hay que recordar también que Malena, durante unos meses, estuvo trabajando para un programa que emitía IB3, en la sección del corazón. El día que se presentó, creo recordar que dijo, «hoy no he venido a hablar de mí». Fue un programa más bien efímero, un poco menos que lo que duró ella en él.

Dicho lo cual, Malena, estando con Javier, está al lado del glamour y de la gente con glamour. No me extraña, pues, que ahora se codee con la diva Paulina Rubio y su marido, el empresario Colate, ambos buenos amigos de aquél. Ni que la veamos entrar en fiestas exclusivas, luciendo modelos exclusivos.

Sin embargo -creo-, sigue siendo la chica de siempre. Al menos, cada vez que hablo con ella, así me lo parece.

Estos días ha estado en Mallorca, a bordo del barco de los Hidalgo. La distancia que nos separaba de ella era tremenda, pero con un buen telex pudimos dejar constancia de su paso por esta su tierra. Imagino que se sorprendió verse en los papeles.