La reparación del paseo que recorre el dique de Sant Antoni, seriamente dañado en marzo pasado por un temporal, se iniciará el 1 de octubre, según acordaron ayer Ports de Balears y el Ayuntamiento en el transcurso de una reunión en la que se llegó también a un principio de acuerdo sobre la edificación de una nueva sede para la autoridad portuaria.

«Ports nos ha dicho que ya estaba decidido el proyecto por lo que hemos decidido, a pesar de la urgencia del proyecto, que no era el momento de ponerse a hacer las obras en pleno verano», explicó el alcalde, Josep Sala.

El vicepresidente ejecutivo de Ports, Manuel Patiño, coincidía en esta apreciación y explicaba que el proyecto, adjudicado a la empresa Melchor Mascaró por 79.200 euros, está previsto que se desarrolle en seis semanas.

Respecto a los problemas surgidos, Patiño apuntó que «el paseo, en el proyecto, estaba bien planeado, pero a la hora de realizarlo hubo problemas de forma que algunas losetas no estaban ancladas y las que sí lo estaban lo hacían a una base deficiente de hormigón».

El Consistorio realizó la petición de que se arregle el extremo del paseo, un punto que el representante del Govern se comprometió a estudiar, «porque hay unos depósitos de combustible y hay que ver si es aconsejable o no».

En el encuentro de ayer también se habló de la remodelación del Passeig de la Mar y de la construcción del nuevo edificio para la Autoridad Portuaria. En este sentido, ambas administraciones alcanzaron «un principio de acuerdo» sobre la eliminación de los seis metros de retranqueo que actualmente presenta este edificio y la cofradía de pescadores.

Este desplazamiento fue reclamado por el Ayuntamiento «para dejar lo más abierta posible la vía que baja, la calle del Mar, aunque no pase a tener tráfico rodado».

Patiño explicó que sólo falta licitar el proyecto y que espera que este invierno se pueda hacerel proyecto. Respecto a la remodelación del paseo, se estudiará la posibilidad de realizar las obras al mismo tiempo.

Al mismo tiempo también se pidió desde el municipio que la nueva cofradía se levante en la zona de muelles, para unir en un sólo espacio atraque, aperos y oficinas. Esta propuesta fue recogida por Ports, aunque no se tomará una decisión sin consultar al sector.

Por último, el representante de Ports de Balears, dependiente de la Conselleria de Medi Ambient, planteó la construcción de unos baños y duchas para los usuarios de los puntos de atraque del puerto en la zona de las pérgolas de los servicios de excursiones en barco.

Ayer se abordó también el tema del Passeig de ses Fonts. El representante del Govern señaló que los servicios jurídicos estudian qué fórmula es la más adecuada, si realizar una autorización, firmar un convenio de cesión como el remitido por el Consistorio o una concesión.

Patiño apuntó que existe un precedente de 1963 por el que se cedía la gestión a cambio de que el Ayuntamiento hiciera el mantenimiento y entregara al Gobierno el 20% de los ingresos.

Por otro lado, respecto al Plan Director del Puerto, Sala pidió que se acelere al máximo y el vicepresidente de Ports apuntó que ya se ha contactado con una empresa para iniciar lo más rápido posible su redacción.