Los tres cerditos y Blancanieves comienzan a hablar sobre la huida de los enanitos, que la han abandonado sin decirle nada. Así comienza la obra de teatro 'El ball dels tres porquets', que tuvo lugar ayer en el Colegio Portal Nou a las diez y media de la mañana con alumnos de la escuela de verano del Casal de Joves d'Eivissa. Después, hacen aparición más personajes de los cuentos clásicos, donde bailan y hablan de diferentes situaciones. «Los niños que actúan, que tienen edades de 12 a 15 años, lo hacen para un público muy joven de 3 a 6 años. Los diálogos son improvisados y más que una obra de teatro tradicional se pone especial énfasis en la improvisación y el baile», manifestó Belén, técnica de Juventut.

Hoy y mañana también harán obras de teatro y el lunes será la función final, donde también acudirán padres para contemplar la puesta en escena de sus hijos. En la obra, después de que Blancanieves y los cerditos hablaran, aparece Cenicienta, que ha perdido su zapato,de la princesa Rapunzel, una Caperucita algo distraída y el malvado Lobo, que deja una tarta envenenada para abatir a los buenos del cuento. Los niños, que observaban la obra con mucha atención, gritaban que no se la comieran. El punto más divertido de la actuación fue cuando salen a escena uno a uno y se marcan un baile: Caperucita baila flamenco, Rapunzel se vuelve muy rockera, Blancanieves baila acompañada de la canción Tengo el corazón contento, Cenicienta pone un punto elegante y el Lobo baila al son de un Hola mi amor, yo soy tu lobo, de la canción Caperucita Feroz de la Orquesta Mondragón. Finalmente, los tres cerditos se marcan un baile en el que las caídas son la protagonistas.

«Lo mejor de todo es que mientras te lo pasas bien con tus amigos haces reír a la gente que viene a verte», explicó Lucas, a lo que su compañero Manu añade: «Toda la obra ha sido hecha por nosotros, los diálogos los hemos improvisado, pero también hemos estudiado unas pequeñas pautas para entendernos y no liarnos en escena». Aseguran que minutos antes de empezar estaban muy nerviosos. A.R.