El grupo popular en el Consell d'Eivissa y en el Ayuntamiento de Sant Josep denunció ayer «la destrucción de un vía crucis original a causa de las obras de ampliación del paseo Pere Canellas financiadas por el Plan E, y en contra de las prescripciones realizadas por la Comisión Insular de Ordenación del Territorio y del Patrimonio Histórico Artístico (Ciotupha)».

La consellera Carolina Torres y la concejala María José Ribas, acusaron al alcalde, Josep Marí Ribas, Agustinet, de «desatender» de forma «premeditada» las prescripciones de la comisión de patrimonio, que en su informe favorable sobre la ampliación del paseo especifica que «el muro de piedra (muro del vía crucis) existente ha de ser restaurado y mantenido en su lugar». Este prescripción, según Torres, venía reforzada por un informe técnico que insistía en la necesidad de proceder a una acción de «restauración y reposición, más que en la demolición y reconstrucción, ya que se trata del vía crucis original», destacó. «Restaurado y mantenido no es igual a destruido y rehecho», se quejó la consellera, que aseguró que el Consistorio rehizo el muro y el vía crucis «con técnicas que no se asemejan en nada a las que se usaban antiguamente».

Para Torres esto es «un escándalo» en el que «Ayuntamiento y Consell son cómplices». «Pero lo más escandaloso es que los responsables de estos hechos son los mismos que no hace mucho tiempo denunciaban en los juzgados por hechos similares a éste», afirmó Torres, quien informó que el PP pedirá explicaciones porque quiere saber si el «director de Patrimoni y reconocido arqueólogo tenía conocimiento de estos hechos y al parecer no ha dicho nada».

El vía crucis se encuentra en el radio de protección de la iglesia, declarada Bien de Interés Cultural.

«No se ha destruido»

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Sant Josep han querido desmentir «categóricamente que se haya destruido el vía crucis» ya que, según indicaron, «en todo momento se ha cumplido escrupulosamente con las prescripciones de la Ciotupha». Asimismo, indicaron que durante las obras han estado en todo momento en contacto con la dirección de Patrimonio del Consell «con el fin de rehacer y no de destruir los elementos de la pared y vía crucis que ya existían». «Se ha restaurado la parte existente y se ha mantenido como se encontraba originariamente», señalaron.

Por último, desde el Consistorio destacaron que se reconstruyó un «paso del que ya no quedaba absolutamente nada», y que se realizó «gracias a la documentación antigua y al asesoramiento de los vecinos».

La consellera de Patrimonio, Marga Torres, explicó que por su mal estado el muro «tuvo que ser reconstruido» pero que la intervención se realizó «con las mismas piedras». Asimismo, indicó que el vía crucis original «se mantiene» y que además «se ha recuperado otro que ya no existía y que en fotos antiguas aparecía». La consellera defendió la actuación del Ayuntamiento de Sant Josep y destacó que durante las obras que estuvo en todo momento en contacto con el Consell.