El Gobierno central reiteró ayer su preferencia por dejar el buque Don Pedro en el fondo del mar de la isla de Eivissa, en lugar de reflotarlo, asegurando que existen estudios que acreditan que la mejor estrategia es «dejar la embarcación en su situación actual» y no aconsejan el movimiento del pecio, hundido en aguas ibicencas en julio de 2007.

Así lo expuso el Ejecutivo central en respuesta a la pregunta parlamentaria formulada por los cuatro diputados del PP por Balears en el Congreso -María Salom, Enrique Fajarnés, Juan Carlos Grau y María Antonia Mercant-, quienes solicitaron información sobre las razones de por qué no se ha reflotado este buque.

En su contestación, el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino expone a los diputados que los análisis encargados recomiendan el seguimiento periódico del pecio y llevar un señalamiento del mismo mediante el marcado de boyas en la zona del hundimiento.

Con ello, se establecería como objetivo «evitar cualquier problema para la actividad marítima del entorno del buque», expone el departamento dirigido por Elena Espinosa.

También se abordó un estudio realizado por una empresa noruega, relativo también al riesgo de contaminación del pecio y el análisis de la posibilidad de su reflotamiento. En ambos casos, las conclusiones coinciden en mantener el pecio en su situación actual.