La Autoritat Portuària de Balears (APB) aseguró ayer que respetará el acuerdo institucional por el que se pospone el inicio de las obras, previsto para el próximo mes de diciembre, «hasta que se clarifique» la denuncia ecologista interpuesta ante la Unesco, pese a la imposibilidad de saber cuánto tiempo será. El ente público, a través de un portavoz, restó importancia al retraso que ésto puede provocar y recordó que, pese a todo, ellos están en disposición técnica y operativa de, a partir del mes que viene, empezar con los trabajos para la construcción de las plataformas del proyecto. Desde Puertos se recordó el compromiso de esperar al momento oportuno para poner en marcha una reforma que, en su opinión, «cuenta con el respaldo de la mayoría de la población», por las necesidades de la isla y los problemas que la actual configuración presenta tanto por su cercanía a los barrios históricos como por las limitaciones que esto supone para el transporte marítimo.

La propia alcaldesa fue un poco más precisa sobre el momento exacto de inicio de las obras y recordó ayer que se debe esperar tan sólo hasta que se conozca el contenido del informe. «El comité nos dijo que no se podían empezar las obras hasta que no viniera la misión, que ya está hecha, pero considero que se ha de esperar a ver lo que piensa la misión de la Unesco».

Lurdes Cota añadió que ésta es su opinión «y la de la mayoría de las instituciones implicadas». Pese a este compromiso, mantuvo que el proyecto del puerto «no pone en peligro los bienes que hay» y aseguró que «no hay preocupación» por la posibilidad de perder la declaración. «A los evaluadores se le ha dado bastante información y se han ido con una idea clara de lo que está pasando. No sé lo que pondrán en su informe, pero quizás hubiera sido mejor si no hubieran tenido que venir». Al mismo tiempo se mostró segura de que habrá final feliz, pero también se mostró tajante: «No es positivo poner en cuestión los bienes declarados».

El acuerdo del Patrimonio Mundial contempla que a final de año esté hecho el informe. La decisión sobre la declaración corresponde al Comité de Patrimonio Mundial, pero eso no quiere decir que se tenga que esperar, todo dependerá a lo que diga el informe. Posiblemente, Vila conozca antes el contenido de la inspección. «Patrimonio Mundial informa al Ministerio de Cultura y supongo que cuando lo crea conveniente lo comunicará a las instituciones», explicó.

En pausa

Costa señaló que «si el informe dice que se espere, se habrá de esperar y si da pie a que se pueda comenzar las obras, es probable que se haga. En todo caso, siempre preservar y no poner el peligro el patrimonio, pero sabemos que es urgente que se puedan acometer las obras del puerto, que hay mucha gente a favor». «Los evaluadores entendieron perfectamente que beneficiaba mucho a los bienes culturales y, en todo caso, había que vigilar que fueran salvados los bienes naturales», añadió.

En cuanto a que el informe contemple cambios en el proyectos que supongan un retraso, Costa aseguró que éste se encuentra «dentro de los límites establecidos». «Ya veremos qué pasa, porque si se pide un retraso de un par de meses no pasa nada; el proceso de licitación estaba en marcha y había que continuarlo».