El Consell de Formentera tiene desde ayer su primer Reglamento Orgánico de Funcionamiento del Consell, ROC, por el que se regirá la vida institucional de la isla. El pleno extraordinario celebrado ayer aprobó con los votos a favor del equipo de gobierno formado por GxF y PSOE, así como los del GUIF en la oposición, mientras que el PP, también en la oposición, se abstuvo pese a que la mayoría de su enmiendas al texto inicial habían sido incorporadas al texto aprobado ayer.

No obstante ocho votos a cuatro dieron una mayoría absoluta y cualificada al refrendo de esta normativa interna que, en palabras del conseller de Economía, Hacienda y Urbanismo, Bartomeu Escandell, «el Consell podrá desde ahora funcionar como tal a nivel de plenos, a nivel de derechos y deberes del equipo de gobierno y de los partidos en la oposición, pero al mismo tiempo impulsar figuras como la junta de portavoces, las comparecencias anuales de los consellers para dar cuenta de su gestión, el debate anual del Consell, las fórmulas de control al equipo de gobierno para la participación ciudadana o la creación de la Comisión Técnica Asesora (CTA) en materia de urbanismo». Escandell señaló que la CTA agilizará la tramitación de las licencias urbanísticas que ya no dependerán de la CIOTUPHA de Eivissa, pero al mismo tiempo aseguró que todas aquellas tramitaciones que requieran el interés general se debatirán siempre en pleno. Otra de las grandes novedades que supone el nuevo ROC es que el diputado por Formentera, en la actualidad Pep Mayans, apoyado por GUIF y PP, tendrá silla y voz en los plenos del Consell aunque no voto.

Escandell agradeció las aportaciones efectuadas por los partidos de la oposición GUIF y PP para conseguir un ROC mejor del que fue el punto de partida de las discusiones para llegar a un consenso final, aunque lamentó la postura del PP que durante el pasado verano «rompió relaciones» con el equipo de gobierno y exigió que cualquier tipo de negociación se hiciera en comisiones informativas «con luz y taquígrafos» como recordó José Manuel Alcaraz, presidente del PP, en diversas ocasiones en el transcurso del pleno en el que también repitió que el texto inicial era «muy largo, muy malo, con demasiados artículos (206) y que su partido había tenido que plantear enmiendas a casi la mitad de los mismos».

A ello Escandell le repuso que si tres de los cuatro partidos presentes en el Consell habían llegado a un consenso quizás la postura equivocada era de los populares. «Se han quedado solos», dijo Escandell cuando Alcaraz aseguraba que los cuatro consellers del PP en menos tiempo habrían podido coger el antiguo reglamento del Consell d'Eivissa i Formentera y rehacerlo en base a las necesidades de la Pitiüsa Menor.