El secretario de Organización del PSOE ibicenco, Julián Aguilar, negó ayer que haya voces discordantes dentro de la agrupación de Vila que critiquen la gestión que está realizando la alcaldesa Lurdes Costa, tal y como publicó ayer este periódico. El dirigente socialista aseguró estar «convencido» del «unánime apoyo» a la primer edil.

«Quiero negar categóricamente que existan esas críticas», explicó Aguilar. «Precisamente hace poco hemos tenido una asamblea general en la que Costa y sus concejales socialistas explicaron al partido cuáles han sido sus actuaciones de Gobierno y en dicho encuentro no se escucharon voces discordantes», añadió el responsable socialista de organización.

Abundando en esta idea, Aguilar resaltó que «precisamente en las asambleas es el momento de que, si alguien tiene que decir algo, que lo haga, pero en cambio se votó de forma unánime el apoyo a esta gestión». Es más, el dirigente progresista incluso aseguró que «hacía mucho tiempo en que en las asambleas de Vila no se tenía ese grado de coincidencia y de apoyo».

Aval a Costa

Tal y como se publicó este martes, sectores de Eivissa pel Canvi y del PSOE de Vila se muestran en privado molestos por cuestiones como el retraso en la tramitación del Plan General de Ordenación Urbana, la falta de solares para colegios o la ausencia de soluciones para el problema del aparcamiento, así como la falta de diálogo y tacto por parte de Costa en determinadas cuestiones.

Un ejemplo de esto serían los ataques de la alcaldesa al GEN y a l'Institut d'Estudis Eivissencs por sus críticas al proyecto de ampliación del puerto.

«En este caso concreto, Costa se hace portavoz de la postura del partido tras un debate interno en los órganos del partido», defendió Aguilar, quién añadió: «es más, algunos habrían sido más tajantes y contundentes con sus declaraciones respecto a los ataques recibidos en cuanto al tema del puerto».

Aguilar también negó que el secretario general de los socialistas baleares y president del Govern, Francesc Antich, haya mostrado ningún malestar por la gestión de Costa en Vila.

«Lo normal es que, si Antich está descontento, nos lo haga saber a Xico Tarrés o a mí en función de nuestros cargos (el presidente insular es secretario general de los socialistas ibicencos), pero no es el caso», apuntó. «Hace unas semanas tuvimos un encuentro en la Isla con Antich y no nos comentó nada al respecto», añadió.