Diego Ruiz fue reelegido ayer por cuatro años como secretario general de UGT durante el octavo congreso ordinario del sindicato que tuvo lugar en el Centro Cultural de Puig d'en Valls bajo el lema: 'El trabajo, lo primero'.
Tras ser renovado, el líder sindical apuntó que sus principales objetivos para este nuevo mandato son «intentar el mantenimiento del empleo y la recuperación, mediante los convenios, del que se ha perdido». «Además, respecto a la tan cacareada reforma laboral, estamos dispuestos a discutir sobre cualquier propuesta pero no a aceptar unos cambios que supongan una pérdida de derechos», añadió.
Ruiz prevé dificultades para lograr ambos objetivos ya que «lo deseable sería que todos nos mostráramos sensatos, pero por lo que hemos visto, hay empresas que han usado la crisis para adelgazar sus plantillas injustificadamente y va a ser difícil que en ellas la recuperación económica conlleve empleo».
Igualmente, reclamó a las Administraciones que negocien «los posibles retrasos en la aplicación de las mejoras de los convenios» pero, adelantó, que no aceptarán «posiciones unilaterales» como la mostrada por el Govern.
El secretario general de la UGT balear, Lorenzo Bravo, acudió al acto y denunció la actual crisis económica, a la que se ha llegado «por la especulación». También criticó que las Administraciones «se hayan cargado el diálogo social» y que no cumplan los convenios.
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