Desde las 14,45 y hasta las 15,15 de hoy tienen previsto concentrarse a las puertas del centro penitenciario de Eivissa sus funcionarios como acto de «protesta por la mala gestión del equipo directivo y la situación laboral».

Los trabajadores del centro aseguran que han percibido un aumento del riesgo para su integridad y la de los internos por la carencia de personal, que se «agudiza en los servicios nocturnos». Dicen, además, que ha aumentado la dificultad de los trabajadores a la hora de disfrutar de vacaciones y permisos, y fruto de ello, hay un incremento en el número de bajas laborales, «con el estrés laboral que conlleva».

Denuncian también los trabajadores del centro penitenciario el hostigamiento que, afirman, sienten «la mayoría de los funcionarios», por parte del equipo directivo y la «pasividad total e insensibilidad de éste frente a las reivindicaciones de la plantilla».

Legislación

Los delegados sindicales denunciaron públicamente la «imposibilidad material» que estaban padeciendo para aplicar la ley penitenciaria en lo más básico, algo que, dijeron, repercute en su labor con los internos y en la finalidad propia de la institución. Para los trabajadores esta situación se produce como consecuenca de la «carencia y disminución progresiva del personal penitenciario y la estructura obsoleta de un centro de más de 26 años».

Por otra parte, los delegados sindicales explicaron a los medios que se está produciendo una «clara inadecuación entre las necesidades reales del centro penitenciario de Eivissa y las obras y gastos que se están llevando a cabo».

Por último, los trabajadores de la prisión de Eivissa lamentaron la «ausencia de los responsables políticos» frente a la situación de explotación de personal y la «demagogia utilizada para con los internos y el engaño y confusión creados en la opinión pública mediante inversiones y proyectos innecesarios». Según los trabajadores, se están dejando a un lado problemáticas tan graves como el hacinamiento, la seguridad, la falta de departamentos contemplados por la ley, la inexistencia de instalaciones adecuadas para las comunicaciones de los familiares con los internos y para el desempaño de actividades ocupacionales y laborales.

Los delegados sindicales recordaron durante el encuentro con los medios que el centro está preparado para albergar a 60 internos y ahora mismo hay más de 130.