A sólo unos días de asumir como nueva delegada de Ports de les Illes Balears en Eivssa, Silvia Limones tiene no pocas peticiones por parte del Ayuntamiento de Sant Antoni del que continúa formando parte como concejala por la formación PSOE-ExC.

El equipo de Gobierno quiere que la nueva delegada «respete» todos los acuerdos de pleno que votó a favor como edil. Son bien conocidos los enfrentamientos que hubo desde el inicio de legislatura entre Sant Antoni y Ports de Balears mientras estuvo capitaneada por Unió Mallorquina a través de la Conselleria de Medi Ambient. Ahora, con la formación fuera de las instituciones desde la ruptura del pacto de gobierno, y con Ports en manos de los socialistas desde la Conselleria de Obres Públiques, Sant Antoni no sólo espera que los enfrentamientos se suavicen, sino también quiere que se empiecen a resolver los asuntos pendientes que no son pocos, dada la influencia y competencias que tiene el puerto en la bahía de Portmany.

Passeig de ses Fonts

Así, la primera cuestión destacada por el equipo de Gobierno es la desafectación del Passeig de ses Fonts. Un convenio aprobado por unanimidad en el Ayuntamiento que desde hace más de un año espera la rúbrica de Ports. Se trata de un conflicto de competencias que resurgió en 2009 cuando la Ports reclamó la titularidad del paseo y que motivó las quejas del Consistorio que lo mantuvo «durante más de 30 años y lo reformó hasta dos veces con fondos públicos». Finalmente, a la espera de que algún día se concrete el traspaso de titularidad de Ports al Ayuntamiento, se propuso realizar un convenio de gestión que aún no ha sido concretado. Mientras tanto, el Ayuntamiento tiene que pedir permiso a Ports para realizar cualquier actividad en el paseo.

Pero esta no es la única cuestión que tiene pendiente Ports con el Ayuntamiento. La lista de temas «es larga» según recuerdan desde el Consistorio, y tiene como principal motivo la falta de un Plan Director de Usos y Gestión del Puerto, que incluye muchas de las peticiones municipales hacia las autoridades del portuarias. La redacción de este Plan de Usos aún está en suspenso, cuando, además, tiene una acuerdo plenario del Parlament de les Illes Balears, que también, hace un año, instó al Govern a redactarlo de acuerdo con las autoridades municipales.

De este plan de usos dependen otra peticiones como la «ampliación de atraques para cruceros mediante al instalación de un duque de Alba», «la regulación y seguridad de los pantalanes flotantes y de los fondeos en la bahía», «la ampliación del edificio administrativo del puerto», el «proyecto de reforma y modernización del tramo entre el muelle de pescadores y el dique», «los usos y gestión de la estación marítima», y «el deslinde de la zona portuaria».

Nada se sabe de las inversiones desde la última visita de UM

El último conflicto entre la Ports de les Illes Balears y el Consistorio fue durante la última visita del ex conseller Miquel Àngel Grimalt, de UM, cuando hace un mes vino para anunciar una inversión de dos millones para la remodelación de la oficina portuaria y de paseo marítimo. Asimismo se anunció que en los próximos meses empezarían las reuniones con los diferentes sectores implicados para iniciar la elaboración del plan director del puerto de Sant Antoni. Durante esta misma visita el Consistorio también reclamó que se remodelen las instalaciones de la cofradía de pescadores, anexas a las oficinas portuarias. Después de que UM fuera echada de las instituciones, hace ahora un mes, conseller d'Habitatge i Obres Públiques, Jaume Carbonero, actual responsable de Ports de Balears indicó que el Govern balear mantendrá «todos los proyectos que sean razonables y que puedan tener soporte presupuestario» de la infraestructura portuaria de Sant Antoni. Sin embargo, desde entonces, nada se sabe de las inversiones anunciadas.