La nueva erupción del volcán islandés y la posterior nube de cenizas volvió a obligar ayer a cerrar cerca de una veintena de aeropuertos nacionales y cancelar numerosos vuelos. Entre ellos, diez conexiones con origen o destino en el aeropuerto de Eivissa, según la información facilitada por AENA.
De esta manera, ayer se tuvieron que cancelar dos conexiones con Girona (una llegada y una salida), otras dos con Barcelona y seis vuelos internacionales (dos con Irlanda y cuatro con Reino Unido).
El aeropuerto de Palma de Mallorca, por su parte, canceló 51 vuelos nacionales (13 llegadas y 14 salidas) que tenían que conectar con los aeropuertos de Bilbao, Salamanca, León, Oviedo, Santiago de Compostela, Girona, Burgos, Santander, Barcelona y Reus. Además, no se pudieron realizar tampoco un total de 24 trayectos internacionales, cinco de los cuales unían la capital balear con Irlanda, 17 con Reino unido y dos con Alemania. Por lo que respecta a Menorca, se cancelaron cuatro vuelos, todos ellos nacionales que unían la isla con el aeropuerto de Barcelona.
La nube de cenizas volcánicas, que penetró en el espacio aéreo español a las dos de la madrugada del sábado, obligó a cerrar ayer por la mañana los aeropuertos de Santiago, A Coruña, Vigo, Asturias, Santander, Burgos, León, Valladolid, Salamanca, Bilbao, San Sebastián, Vitoria, Zaragoza, Huesca, Pamplona y La Rioja, de la red AENA, y el de LLeida, que no pertenece a AENA. A estos aeropuertos se sumaron ayer a las 15,30 horas el aeropuerto de El Prat-Barcelona, Girona y Sabadell.
AENA ha reforzado los servicios de información y atención a los pasajeros (servicio médico, seguridad, limpieza y restauración) en los aeropuertos cerrados al tráfico aéreo por la nube de cenizas volcánicas desde primera hora de la mañana.
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