El ex alcalde de Santa Eulària flanqueado por su abogado Rafael Perera y su hijo, Diego Guasch. | Irene G.Ruiz

El ex alcalde de Santa Eulària Vicent Guasch se sentó ayer en el banquillo ante la Audiencia Provincial junto a los hermanos Parrot, propietarios de la cantera de ses Planes, que han explotado hasta 2006 sin licencia municipal. Los hermanos Parrot y el ex alcalde se encuentran acusados por un delito contra el medio ambiente. Además, a Vicent Guasch se le acusa también de prevaricación, lo que puede suponer una pena de inhabilitación especial para empleo o cargo público durante siete años.

En el juicio, que se prolongó durante más de cuatro horas, el ex alcalde aseguró que una vez que el cogió el mando del Ayuntamiento, en 1979, la cantera ya estaba en funcionamiento, «por lo que había la sospecha de que por silencio administrativo tenía un permiso», señaló. A pesar de esto, el Consistorio nunca concedió la licencia municipal para llevar a cabo esta actividad ni respondió a la instancia de la propiedad, fechada en 1978, solicitando permiso municipal. Los hermanos Parrot sólo obtuvieron en 1979 una autorización por parte del Ministerio de Industria y Energía para la explotación de la cantera, documento que no exime de la licencia de otras administraciones.

Consejos y casualidades

El ex alcalde indicó en varias ocasiones que siempre actuó «aconsejado y avalado» por los servicios jurídicos municipales. A pesar de esta afirmación, Fiscalía hizo referencia a dos escritos desfavorables, uno del aparejador y otro del ingeniero industrial, donde se rechazaba la explotación de la cantera, que finalmente obtuvo licencia municipal de actividad en 2006. A esta cuestión, Guasch apuntó que no sabía lo que decían los escritos: «A mí no se me daban estos informes». A todo esto, la cantera también se encuentra en un lugar catalogado como suelo rústico forestal protegido, que prohibe cualquier instalación de extracto mineral a cielo abierto. A pesar de todo esto, el ex alcalde ni ordenó la paralización de la explotación ni incoó expediente sancionador.

El ex primer mandatario de Santa Eulària, respondiendo a las preguntas del fiscal Antoni Torres, indicó que una vez aprobado el Plan Sectorial de Canteras se requirió a todas las canteras del municipio la documentación necesaria con el fin de legalizarlas. El requerimiento a la cantera de ses Planes se hizo seis días después de que se presentasen hasta siete denuncias por parte de vecinos y de un requerimiento del Consell Insular alegando la incoación de un expediente por infracción urbanística. Estas coincidencias fueron calificadas por el ex alcalde de «casualidades» y apuntó desconocer el escrito del Consell y las denuncias. «Sabía más por la prensa no por los escritos registrados en el Ayuntamiento», señaló.

A la cuestión del fiscal de por qué se cerró la cantera de Santa Bárbara y no la de ses Planes, ambas en la misma situación, Guasch explicó que la primera no aportó ningún tipo de documentación mientras que la de los hermanos Parrot entregaban la documentación solicitada e «intentaban legalizarla».

Además, según el punto de vista del alcalde era función del Consell controlar la actividad de las canteras. «No es lo mismo una licencia de obras para la construcción de una casa que una cantera, que tiene permiso de Minas y de Industria y ya trabajaban mucho antes de entrar yo como alcalde», indicó. Asimismo, añadió que «nunca me dijeron [desde el Consell] que tenía que cerrarla». «Tenía permiso de Industria y la Guardia Civil controlaba las explosiones y las protegía; nunca pensé que esta cantera fuera ilegal», añadió Vicent Guasch.

«El 99% de las canteras trabajan sin licencia»

Los hermanos Parrot también declararon ayer ante el tribunal de la Audiencia Provincial y uno de ellos aseguró que el «99 por ciento de las canteras trabajan sin licencia municipal, ¿qué vamos a hacer, una ley sólo para nosotros?», recriminó ante las preguntas del fiscal. En este sentido, la propiedad de la cantera indicó que en un principio contaban con todas las licencias y relató que se desplazaron hasta Mallorca con el alcalde anterior a Vicent Guasch y en el departamento de Industria le comentaron que ninguna «cantera de España pide la licencia municipal». A pesar de esto, la propiedad de la cantera apuntó que cuando cambiaron la normativa «nadie nos hizo cerrar». «Nadie nos ha dicho que no pudiéramos explotar la cantera a pesar de no tener licencia municipal», señaló J.Parrot. Asimismo, indicó que desconocía la clasificación de suelo en el que se encuentra la cantera y apuntó: «Todos los canteros estamos igual, no hay ningún alcalde que quiera conceder una licencia». El otro hermano, M. Parrot, indicó que por una enfermedad no se ha encargado nunca de la gestión de la cantera.

Los técnicos desaconsejaron la licencia de actividad por la cercanía a las viviendas

A lo largo de la primera jornada del juicio por la cantera de ses Planes también testificaron varios testigos periciales así como diferentes vecinos de la infraestructura afectados por los ruidos de las voladuras y de la maquinaria utilizada.

En el primer caso, el ingeniero industrial municipal realizó un informe fechado en diciembre de 2000 donde se concluye que en el proyecto «existen numerosas referencias a que la actividad de extracción ha venido realizándose durante los últimos años». «Ello supone una violación del artículo 30 de la ley 8/1995 de 30 de marzo (...) donde se establece que no se podrá comenzar la actividad sin que haya concedido la licencia municipal de apertura y funcionamiento».

En este sentido, el ingeniero industrial señaló que el emplazamiento no «cumple con las distancias mínimas de seguridad establecida», así como que el contenido del Estudio de Impacto Medioambiental presentado «no se adapta a los mínimos expuestos». Aún así, durante la declaración el ingeniero apuntó que con una evaluación medioambiental más extensa se podría haber subsanado la problemática y la distancia era una cuestión «eximible». Ante las preguntas del fiscal sobre la pasividad del ex alcalde, el ingeniero industrial municipal apuntó que no entraba en sus competencias decirle (a Vicent Guasch) que cerrase la cantera. «Es un informe facultativo, no vinculante», señaló.

El aparejador municipal, por su parte, apuntó en su informe que la actividad de explotar la cantera era peligrosa y que el emplazamiento no se ajustaba a la normativa urbanística del municipio. En este caso, la acusación particular cuestionó por qué en ese documento no aparece un pronunciamiento claro en las conclusiones y se sustituye por unos puntos suspensivos. El aparejador señaló que no existe ninguna obligación de pronunciarse.

En otra de las declaraciones también salió a relucir un informe realizado a petición de Hábitat y Basuras, la entidad vecinal denunciante, por un geólogo donde se apunta que la reconstrucción de esta cantera es «imposible» ya que no se han seguido las recomendaciones de realizar las laderas con una pendiente de 45 grados con el fin de hacer las bancadas necesarias. El geólogo también manifestó durante su declaración la preocupación por la cercanía de las viviendas: «Entiendo que no tendría que haber casas o canteras tan cerca», apuntó. En cuanto a la cantera de Santa Bárbara, cerrada por sentencia y ubicada en las proximidades de la de ses Planes, el geólogo indicó que son «casos muy parecidos» aunque reseñó que en la ya clausurada el impacto visual es mayor por la orientación, «aunque los problemas de restauración son los mismos».

Consecuencias

En esta línea también se pronunció un biólogo que destacó que desde el punto de vista técnico «sería recuperable, y se podría llegar a una situación parecida, pero económicamente sería más difícil». «No debe haber mucha vigilancia con los planes de restauración porque, si no, no se llegaría a esta situación». En el informe realizado por este biólogo se enumeran una serie de consecuencias a causa de la extracción de áridos como es la desaparición de hábitats forestales, la acumulación de aceites y la posibilidad de contaminación o el derrumbamiento debido a la gran verticalidad de las canteras: «La documentación que analizamos tenía deficiencias serias desde el punto de vista técnico. El plan de restauración era inviable. Todos estos frentes hacían que la situación fuese preocupante».

«Desde hace un tiempo no molesta y no han salido grietas nuevas»

A lo largo del juicio declararon hasta cuatro vecinos afectados por el trabajo de extracción de áridos y explicaron al tribunal de la Audiencia Provincial todas las molestias ocasionadas. Aún así, algunos coincidieron en que desde hace unos años (desde que cuenta con las autorizaciones correspondientes) «no molesta y no han salido nuevas grietas». Los vecinos relataron que el camino de acceso a la cantera es «muy malo y resbaladizo, produciéndose diferentes conatos de accidentes». Uno de los afectados comentó que tras una de las explosiones aparecieron en las proximidades de su vivienda varias piedras, «algunas de ellas como dos balones de fútbol». La defensa tanto del ex alcalde como de la propiedad incidieron en si los vecinos vivían en el lugar antes del inicio de la cantera o después.