Los progresistas Josep Marí Ribas, Lurdes Costa y Xico Tarrés, comparecieron ante la prensa después del plantón del PP. | Marco Torres

Finalmente los alcaldes del PP decidieron ayer no acudir a a la reunión que había convocado el presidente del Consell, Xico Tarrés, para consensuar la modificación del Plan Territorial Insular (PTI) y el plan de usos de sa Coma. El problema es que los ediles populares se sintieron «engañados» porque se les convocó como si fuera un Consell d'Alcaldes, cuando ellos ya no forman parte de él. El alcalde de Sant Antoni, José Sala, explicó que primero les invitaron vía e-mail para hablar del PTI, pero luego se añadió lo de sa Coma y se enmarcó en un Consell d'Alcaldes. Sala recordó que hace tiempo que abandonaron ese foro porque no se decidía sobre «cuestiones importantes». Incluso ayer por la mañana llamaron al Consell para saber si cambiaban esa convocatoria. «No han rectificado, simplemente han dicho que a la reunión la llamáramos como quisiéramos», indicó el alcalde de Sant Antoni, que, de todas formas, se mostró abierto a reunirse «si hace falta de noche» para hablar del PTI.

Tarrés, enfadado

El presidente del Consell, Xico Tarrés, se mostró muy molesto por el plantón de los alcaldes y aseguró que no los volverá a convocar. «Uno es tonto, pero tiene un límite, yo estoy abierto a que vengan cuando quieran pero no podemos convocarlos cada día, hemos estado esperando 45 minutos y ni siquiera nos han dicho que no iban a venir y eso que les hemos dicho que le pongan el nombre que quieran a la reunión», dijo el presidente, que de todas formas, no dio por perdido que se pueda alcanzar un «gran pacto» por el territorio. «No lo descartaré nunca, trabajaré para que haya consenso porque la isla sólo tiene 500 km2 y si no nos ponemos de acuerdo nos lo tenemos que hacer mirar», añadió Tarrés, que recordó que tienen una ronda de reuniones pactadas con diferentes colectivos para consensuar el documento.
Tarrés también utilizó el símil amoroso para hablar de su relación con el PP, al decir que «dos nos se dan un beso si uno no quiere». «Yo estoy estirando los labios para poder dar un beso, pero no me quieren y no sé cuál es el problema, si soy yo o mis labios, pero estaré siempre dispuesto porque la novia me gusta», añadió Tarrés, que abundó más en la comparación y dijo que de momento la chica le da «calabazas».
El presidente del Consell aseguró que este mismo fin de semana tuvo oportunidad de hablar con el alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, y le pidió que asistieran porque podían poner el nombre que quisieran al encuentro. Pese a todo, Tarrés, que consideró que es una «lástima» que no se haya podido celebrar el encuentro, se mostró prudente y no quiso acusar de electoralismo a los alcaldes. «No diré ni una sola palabra que lleve a la guerra». De hecho, consideró fundamental alcanzar un pacto territorial. «Hoy otra vez nos estamos tirando los trastos por si la puta reunión se tenía que llamar de una forma u otra y uno ya llega un momento en que está hasta los huevos de hacer el tonto», añadió Tarrés, que cree que la imagen que se da a los ciudadanos no es buena. «Habrá gente que diga, a estos habrá que bajarles un 10% el sueldo, pero no sólo eso, que paguen por hacer el tonto así si no saben llegar a acuerdos», añadió.
La alcaldesa de Eivissa, Lurdes Costa, criticó la «poca lealtad institucional» por parte de los ediles. «Era una reunión importante e interesante y lo más conveniente habría sido que en vez de estar por los cafés de alrededor del Consell decidiendo si venían o no estuvieran aquí hablando con nosotros y aportando para ir hacia adelante y no hacia atrás», añadió. También el alcalde de Sant Josep, Josep Marí Ribas, consideró que los alcaldes del PP quieren tomar siempre demasiado «protagonismo» y calificó de «risible» su plantón.

El PP acusa al Consell de desacuerdos internos y de montar un «guirigay» urbanístico

Los alcaldes populares acusaron al equipo de gobierno del Consell de no ponerse de acuerdo entre ellos y de montar un «guirigay urbanístico». Vicent Marí asegura que siempre que les han propuesto soluciones han tenido la sensación «de que no hay criterio» y de que «no tienen las ideas claras» porque las decisiones se revisan constantemente. «Primero que se aclaren y luego nosotros seremos una sola voz, porque no tenemos que negociar con varios grupos políticos distintos», añadió Marí. Sala no sabe qué opinará la sociedad de este plantón, pero indicó que hay que mirar el fondo del asunto porque Tarrés quizás pretendía «enmascarar» los desacuerdos internos del Consell. «¿Será para que nos posicionemos al lado de una u otra postura?», se preguntó. El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, aseguró sentirse «engañado» y consideró el Consell d'Alcaldes un «paripé». Sala también recordó que en este foro se les «imponen» cosas y no quieren entrar «en esta ficción». Además, aseguraron que se sienten «manipulados».