Portinatx. Sábado 24 de abril de 2010. Mediodía. Varios testigos observan como un helicóptero del SAR aterriza en un terreno situado en la última curva a la entrada de la localidad. Del aparato, un SA 330 Puma, igual que el que se está investigando por el asunto de Formentera, se bajan tres militares. Allí, en el terreno espera un grupo de ocho o nueve personas para subirse al aparato y dar una vuelta por el norte de la isla, según relatan varias personas que presenciaron la maniobra. La excursión dura entre cinco y diez minutos.

Al finalizar el trayecto con los civiles, uno de los ocupantes del helicóptero baja una caja de gambas y varias ensaimadas, porque, según han confirmado diversas fuentes, los militares tienen varios amigos en la zona y van a comer con ellos. Es más, éste es el tercer viaje que ha realizado este helicóptero a Portinatx (los dos anteriores se realizaron el verano pasado) y siempre ha aterrizado en el mismo terreno. Según distintas informaciones, el único permiso solicitado para aterrizar en este terreno se produce a través de particulares, sin que interviniera nadie del Ejército. Varios vecinos de Portinatx han asegurado a este periódico que los vuelos realizados por este aparato resultaban muy «escandalosos» y que no entienden cómo «no había salido antes en prensa» debido a que mucha gente en la localidad conocía este hecho y que «alguna vez» el helicóptero había transportado civiles. Estas mismas fuentes aseguran que uno de los pilotos era muy joven y que entendían que estaba en prácticas. Desde la base aérea de Son Sant Joan una fuente aseguraba que este tipo de viajes son de reconocimiento y que muchas veces el trayecto que se realiza es desde Mallorca hasta la Península pasando por Eivissa.